Diez retos para un año de crisis

MADRID- Las aceras despejadas, las calles silenciosas, sin vallas y sin señales color amarillo propias de las obras, empezaban a hacer que Madrid no pareciera Madrid. Pero la tregua, en cuanto a grúas, ruido y polvo se refiere que dio 2008 a los madrileños, acabó ayer con las doce campanadas. Y es que, pese a que 2009 será el año de la crisis, coincide con el ecuador de la legislatura, una fecha que obliga a los políticos a comenzar a ejecutar los grandes proyectos prometidos para 2011. Vuelven las grúas Si hay un reto para este año, será el de aprobar el examen definitivo del COI para que Madrid pueda convertirse en la sede olímpica de 2016. Para ello, deberá vencer el 2 de octubre en Copenhague a Río de Janeiro, Tokio y Chicago. Pero el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón deberá acometer además otros tres grandes proyectos que también ha comprometido para 2009: Madrid Río y las remodelaciones de parte del Eje Prado-Recoletos y de Serrano. En el caso del primero, el Ayuntamiento tendrá que iniciar todas las obras previstas para la recuperación del entorno del río Manzanares, y comenzar parte de su ejecución para acabarlo en 2011, tal y como prometió. En el Eje Prado-Recoletos, las obras llegarán en marzo, concretamente a la Ronda de Atocha, las Cortes, a un tramo de Recoletos, a Colón, al entorno de la Biblioteca Nacional y a la calle Felipe IV. También será un punto caliente la calle Serrano. Sus obras, que comenzaron en noviembre para aumentar las aceras y construir seis aparcamientos subterráneos, deberán estar acabadas a final de año. La clave del gasto municipal es que el Ayuntamiento ha contado con un «empujón», el de los 554 millones que le correspondió del Fondo de Inversión Local del Gobierno central. Dinero que deberá ser invertido en obras que tendrán que finalizarse en doce meses. Otro de los grandes retos de 2009 es el fin de las obras en la Puerta del Sol que desde hace cuatro años invaden la zona para la construcción de un intercambiador de Cercanías. Esta infraestructura corre a cargo de Fomento que ha asegurado que finalizará a mediados de 2009. Tampoco impedirán los números rojos que en los próximos doce meses la Comunidad elimine el Impuesto sobre el Patrimonio. Esto es porque, pese a la austeridad de las cuentas regionales, Esperanza Aguirre deberá iniciar la construcción de cuatro nuevos hospitales y 55 centros de salud, duplicar sus ayudas a las pymes y abrir 22 nuevas escuelas infantiles tal y como dice su programa electoral. Por último, la Consejería de Sanidad tendrá que ultimar el decreto para que, a partir de este mes, se pueda elegir médico y hospital al margen del área sanitaria.