Doña Letizia una ponente de moda

Doña Letizia tomó la palabra. La Princesa de Asturias fue ayer la responsable de inaugurar la II Jornada «Moda y necesidades especiales» organizada por la Asociación Nacional de Discapacidad y Medios de Comunicación (Adimeco) celebrada en el Museo del Traje. Con una entonación y pausas que captaron la atención permanente del auditorio, hizo un repaso al «pan de cada día de las personas con discapacidad», desde las dificultades para acceder a una tienda con la silla de ruedas hasta los problemas que surgen en un probador con una camisa.
A renglón seguido exigió una mayor «complicidad» de toda la sociedad para mejorar la calidad de vida de este colectivo para que «el problema sea, como para todos, que la camisa no era tan bonita como pensábamos o que nos resulta demasiado cara». Apenas se sirvió del papel donde estaban recogidas sus palabras y utilizó con habilidad las manos como recurso para enfatizar, por ejemplo, que los discapacitados «quieren lo mismo que cualquiera, libertad para equivocarse o acertar».

Incremento de actos
En el café posterior, la naturalidad ante el atril que conserva de su experiencia televisiva era lo más comentado entre los asistentes. «Cuando la he saludado, no he podido evitar felicitarla por lo bien que habla», comentaba Irene Villa, que asistió a la jornada. Precisamente esta soltura ante el auditorio y cercanía en el «tú a tú» ha propiciado que la Casa del Rey haya incrementado de forma significativa su participación en actos públicos desde que en octubre de 2006 estrenara su propia agenda de trabajo con la inauguración de un colegio en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón. Ocurrió dos años y medio después de su boda con Don Felipe y, aunque su principal cometido es acompañar al Príncipe de Asturias en los actos que así lo requieran, los eventos a los que acude en solitario son cada vez más significativos.
Así, si en un principio estaba previsto que sus actividades se centraran en los niños y la juventud, ahora se han unido otros eventos relacionados con la solidaridad, colectivos marginales... Ayer por primera vez la Princesa de Asturias tomaba la palabra en un acto relacionado con el mundo de la moda.
Eso sí, tenía un marcado carácter social como demostró, cuando al finalizar la mesa redonda estuvo con un grupo de minusválidos, que participaron como modelos en un desfile posterior de diseños para personas con discapacidad y tallas grandes. Sobre la pasarela se pudieron ver propuestas de creadores como Amaya Arzuaga, Adolfo Domínguez o Dolores Cortés, que presentó varios trajes de baño para niños. «Hacer realidad estas propuestas es un esfuerzo asumible desde el punto de vista empresarial, se puede hacer, y bien», garantiza la diseñadora valenciana.


De verano y con sus «peep toe»
Se estrenaba en un foro relacionado con el mundo de la moda precisamente en la sede del Museo del Traje. De ahí que ayer, Doña Letizia cuidara hasta el último detalle de su atuendo. La princesa de Asturias escogió un vestido color crema de verano, en el que alternaban las tablas y bordados de la falda, con las semitransparencias y la manga francesa del cuerpo superior. Fue fiel a sus «peep toe» en el formato sandalia, con tacón trepidante y algo de plataforma. Para romper con los colores pálidos del conjunto, escogió una cartera de cocodrilo en tonos madera. La ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, que acompañó a Doña Letizia, optó por un vestido camisero estampado con dominio del verde.