Asia

Conflicto armado

El Gobierno de Nepal cesa a su Jefe del Estado Mayor por considerarle una amenaza al proceso de paz

El Gobierno nepalí, encabezado por el partido maoísta, destituyó hoy al jefe del Ejército, Rookmangud Katawal, con el que ya había mantenido diferencias en público. "El Gabinete ha decidido retirar al jefe del Ejército", aseguró a la prensa el portavoz del Gobierno, Krishna Bahadur Mahara.

El anuncio llegó después de una reunión del Ejecutivo a la que no asistieron los socios gubernamentales de los maoístas, que están en contra de la decisión. El Gobierno pidió a Katawal el pasado 20 de abril que explicara por qué no había obedecido las órdenes del Ejecutivo sobre el reclutamiento de nuevos soldados y otros asuntos castrenses. Pero el Gobierno, encabezado por el primer ministro, el ex líder guerrillero Pushpa Kamal Dahal alias "Prachanda", no está satisfecho con la respuesta del jefe del Ejército, según aclaró hoy el portavoz.

A Katawal le quedaban tres meses para retirarse pero el Gobierno nepalí ha decidido destituirlo ahora. Asume sus funciones de forma provisional el hasta ahora "número dos"del Ejército, Kul Bahadur Khadka.

El Gobierno de Prachanda había protestado por el reclutamiento por parte del Ejército de 2.800 nuevos soldados, algo que consideraba una violación de los acuerdos de paz. Este proceso de incorporación de más soldados, que levantó ampollas en el Ejecutivo de Prachanda, fue suspendido en febrero por el Tribunal Supremo.

El Gobierno también había pedido explicaciones a Katawal sobre ocho generales expulsados por el Ejecutivo que fueron rehabilitados. El Ejército respondía ante el rey hasta la abolición de la monarquía en mayo de 2008, pero ahora el comandante supremo de las Fuerzas Armadas es el presidente de la República -un cargo ceremonial-, Ram Yadav.

La proclamación de la República llegó después de la abrumadora victoria electoral en abril de 2008 de los maoístas, que formaron Gobierno poco después. En virtud del acuerdo de paz alcanzado en 2006 tras una década de guerra entre la guerrilla maoísta y el Gobierno nepalí, el Ejército debe fusionarse con 19.600 ex rebeldes, a pesar de lo cual las Fuerzas Armadas decidieron reclutar nuevos militares.