Fiesta con 134 detenidos

Como es habitual, la resaca de las celebraciones bar- celonistas estuvo marcada por el recuento de daños y heridos. El festejo del tercer título de «Champions» y la triple corona del Barça no fue una excepción y el jolgorio de los 100.000 azulgranas que se congregaron en los alrededores de la Plaza Cataluña y la fuente de Canaletas acabó con una contundente carga policial. El balance: 119 detenidos y 153 heridos. Unas cifras a las que se deben sumar los 83 Mossos d'Esquadra que también requirieron atención médica. Los disturbios se repitieron por muchas poblaciones catalanas y la cifra de detenidos se elevó hasta 134. Una nada desdeñable can- tidad que revela cómo las autoridades siguen sin encontrar una salida al problema y se limitan a pedir «reflexión».

El Ayuntamiento de Barcelona no parece preocupado ante los más de 100.000 euros en daños que la celebración azulgrana ha dejado en las calles de la Ciudad Condal. La concejal de Seguridad del Consistorio, Asumpta Escarp, llegó incluso a tachar de «éxito» la iniciativa municipal de dispersar los puntos de celebración, permitiendo repartir a los aficionados en tres espacios diferentes separados por poco más de un kilómetro de distancia. Tanto el Ayuntamiento como el consejero de Interior, Joan Saura, se felicitaron por haber conseguido que los incidentes hayan sido «mucho me- nores» que en la celebración de la «Champions» de 2006.

 La iniciativa del Ayuntamiento romano de proclamar la ley seca antes y después de la final de la «Champions» ha servido de inspiración para CiU y PP. Ambos grupos exigieron la prohibición del alcohol en el centro de Barcelona durante los festejos por el título azulgrana.