Gente sin complejos

Estos americanos podían haber hecho el anuncio de Dyc, gente sin complejos. Tanto en el sofá como en el césped nos sorprendieron con una presión asfixiante a la salida del balón. Su condición física les ayudó para hacer muchas coberturas. Los nuestros no se sintieron cómodos. No realizaron el fútbol que al nos tenían acostumbrados. Ellos salieron con una marcha más, y eso nos hizo abusar de muchos pelotazos y de centros demasiado precipitados. Sobre todo por parte de Sergio Ramos. Echamos de menos a Xavi, que fue eclipsado por Cesc, que ocupó su zona. Todo esto pareció cambiar en los primeros 15 minutos del segundo tiempo, con la caída de Torres a la banda derecha, que confundió a Bocanegra y Donovan. Fue el único momento en que tocamos la posibilidad de empatar.La falta de complejos reflejó el trabajo de pizarra del entrenador. Se vio un equipo que sabía perfectamente lo que debía hacer en cada momento. No me gusta exagerar, creo que ha sido un simple mal día aunque en la última media hora eché de menos una banda izquierda con Riera y Mata y la entrada de Güiza o Llorente por Villa o Torers, obcecados con el gol.