Hereu gasta en 2 años 32 millones en publicidad pese a la crisis

El enemigo público número uno de Barcelona no es el Real Madrid, que pretende robarle Ribery al Barça, o los toros, por mucho que haya quien se empeñe en convertir la ciudad en antitaurina. El «principal adversario» de Barcelona es la crisis, tal y como señaló Jordi Hereu durante el balance que hizo de sus dos años mandato. La crisis también es la enemiga de la Generalitat, que anteayer se vio obligada a aprobar un plan de ajuste para reducir el gasto en 900 millones de euros. Por ahora, el Ayuntamiento de Barcelona no necesita un plan de choque para afrontar la crisis. Hereu confía en que el Gobierno y la Generalitat cerrarán a tiempo el acuerdo en financiación para que la ciudad pueda tirar adelante sus políticas sociales. Medidas como las que hoy presentará el teniente de alcalde de Hacienda y Promoción Económica, Jordi Williams Carnes, un paquete de subvenciones para que los parados puedan acceder a los equipamientos municipales deportivos y cívicos.La oposición criticó con dureza que el alcalde deje en manos de otras administraciones –de que se pacte o no la financiación–, el desarrollo de su plan de actuación municipal. Y añadió a sus críticas que Hereu reclame que se acuerde ya la financiación, mientras el gasto en publicidad no disminuye. De hecho, el presupuesto de 2009 contempla un gasto en publicidad de 12,1 millones, un 14 por ciento más de lo previsto en 2008, lo mismo que destina a la atención a personas vulnerables en situación de pobreza y a inmigración. Una cosa son las previsiones y otra el gasto real. En 2008, el presupuesto inicial para publidad previsto por el Ayuntamiento de Barcelona era de 5,5 millones, para televisión, radio, prensa, revistas e Internet. Esta partida al final acabó siendo de 11,2 millones de euros – incluye la polémica campaña de «Visca Barcelona» que costó 1,4 millones de euros–.Al gasto publicitario del año pasado se han de sumar, los 5,6 millones de euros para empresas municipales como el Tibidabo o Bimsa; los 2,1 millones para el Patronato Municipal de la Vivienda, el ICUB y Parques y Jardines; y 1,2 millones de euros para los institutos municipales. En total, Barcelona gastó en publicidad, 20 millones de euros, «3.300 millones de pesetas», recordó la concejal de CiU Sònia Recasens, «un insulto para la gente que no puede pagar la hipoteca o ha de recurrir a los servicios sociales para comer»,El alcalde anuncioEste gasto llevó al presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández, a bautizar a Hereu como alcalde anuncio. En 2008, «gasto 60.000 euros al día», denunció. «Siempre sobra dinero para publicidad y después falta para las personas y los barrios», lamentó. El presupuesto de 2009 también prevé un partida para protocolo de 3,5 millones de euros y para relaciones internacionales de 4,1 millones. Además, CiU ha denunciado que mantener la web del alcalde cuesta cada año 315.000 euros, «una barbaridad».