Ibarretxe expresa su satisfacción porque se ha puesto fin a un sinsentido

Además de su alegría, Ibarretxe también ha mostrado su preocupación porque el Tribunal "no ha querido entrar en el fondo del asunto".
Así, ha abogado por que el Tribunal Supremo, según ha indicado, "seguro destino de los recursos que ya se han anunciado", atienda al "fondo del problema y no vuelva a criminalizar el diálogo político".
En este sentido, ha insistido en que "no se ha decidido sobre el fondo, sobre la legitimidad del diálogo político como forma civilizada de resolución conflictos".
Por ello, ha confiado en que "esta causa no discurra por la misma senda que el 'caso Atutxa'"que, según ha recordado, "salió del TSJPV en los mismo términos que los adoptados hoy, para concluir con una condena por parte del Tribunal Supremo".
"Esperemos que este sinsentido se haya acabado para siempre y que nunca más el diálogo político se siente en el banquillo en este país. Que (el archivo) no sea un paréntesis interesado para retomar el juicio en un momento en el que políticamente interese más", ha deseado.
Ibarretxe ha insistido en que "la búsqueda de soluciones para este país no puede estar pendiente de decisiones judiciales arrastradas a lo largo de los años", al tiempo que ha denunciado que la Ley de Partidos es "el origen de las actuaciones penales contra el lehendakari".
Ha defendido que la decisión del TSJPV es la "demostración más evidente"de que el juicio responde a "un claro impulso político"y ha criticado la actuación del presidente del tribunal vasco, Fernando Ruiz Piñeiro, y la de "quienes le han acompañado en este despropósito antijurídico y antidemocrático".
Ha dejado claro que el Gobierno Vasco no se pronuncia sobre su labor como juez ni sobre sus decisiones judiciales, sino sobre su actuación como representante institucional del Poder Judicial en Euskadi, por lo que ha indicado que, "en esa función representativa deben exigírsele responsabilidades ante la crisis abierta y pendiente que ha generado".
La esposa del lehendakari, Begoña Arregi, ha seguido su comparecencia sin posibilidad de preguntas en la misma sala que los medios de comunicación.