Jáuregui rectifica y propone que los eurodiputados paguen la Seguridad Social

BRUSELAS-Ramón Jáuregui acaba de llegar a Bruselas, y antes de empezar a tomar la medida de los pasillos del Parlamento Europeo todavía le llegan ecos de Madrid. A pesar de la ovación que se llevó en su despedida, en esta ocasión los comentarios que recibe no son del todo favorables. La razón, la carta que envió al presidente el Congreso, José Bono, para mantener las condiciones de los diputados nacionales bajo el nuevo Estatuto de los diputados al Parlamento Europeo. Su reclamación, firmada junto al popular Luis de Grandes, ha despertado la crítica de antiguos compañeros de distintos partidos. «Entiendo que a mucha gente le parezca mal si quisiéramos coger lo mejor de cada sitio. Pero eso ha quedado resuelto y aceptamos el sometimiento al marco europeo», indica a LA RAZÓN. Como negociador experimentado, sabe corregir a tiempo. «No conocíamos las condiciones que se derivaban del nuevo estatuto, que entrará en vigor el 14 de julio, pero una vez que hemos clarificado que existe un régimen de prestaciones suficiente para nosotros, renunciamos a cualquier privilegio y duplicidad», aclara. Sin embargo, conserva su posición firme en una cuestión esencial para él, y los otros 49 eurodiputados españoles. «Pedimos a la Seguridad Social que nos permita continuar dados de alta para mantener las misma condiciones de todos los españoles», defiende. Para ello, pide un convenio con el sistema público y están dispuestos a pagar la cotización. Acepta que España decidiese que sus representantes en la Eurocámara se sometiesen a las condiciones de la institución. No obstante, considera «injusta» la consecuencia de quedar desprotegidos «al no cotizar en ningún sistema público europeo». Como orador experto, sabe que el ejemplo personal es convincente: «Tengo 60 años, y llevo 45 cotizando. Cuando quiera jubilarme, dentro de cinco, aunque tenga ahora derecho a una pensión máxima, tengo un agujero de un lustro». Este agujero no le hará caer en una desprotección, ya que recibirá de la Eurocámara una pensión aún por concretar, por eso los españoles han solicitado una reunión con los funcionarios comunitarios. Esta prestación se suma a otras que el vasco intenta matizar, como una cobertura sanitaria, «que sólo te cubre el 65% del gasto» y un salario más abultado que el del diputado nacional, aunque «la diferencia es sólo de 2.000 euros».