Juan Mora: «Aspiro a torear a gusto»

El próximo 15 de agosto, festividad de la Virgen de la Paloma, volverá a hacer el paseíllo, tras seis años de ausencia, uno de los toreros de más solera del escalafón. Se trata del placentino Juan Mora, que, con el poso y la solera adquiridos con los años, volverá a deleitar a los aficionados de Madrid con su toreo clásico. Mora se las verá con un encierro de Mari Carmen Camacho y actuará junto a José Luis Moreno y César Girón.–Son varios años sin acudir a Las Ventas. ¿Cómo afronta el reto?–Encantado y con ilusión. Es un buen momento para volver a Madrid porque hace mucho que no voy. Tengo ganas de sacar todo lo que llevo dentro y qué mejor escenario que el Las Ventas. Me encuentro como si estuviese empezando otra vez, porque sé que aún tengo muchas cosas que decir en el toreo.–La cita será el 15 de agosto. ¿Influye en los toreros el ir fuera de feria?– No estoy acostumbrado. Me recuerda a mis inicios, que era cuando iba fuera de feria; el resto de veces siempre fui en San Isidro u Otoño. En cualquier caso lo considero una buena fecha, un 15 de agosto, día de La Paloma ni más ni menos, es cuando van los aficionados de siempre... me gusta reencontrarme con esos aficionados. –A lo largo de su carrera ha toreado toda clase de encastes. En Madrid lidiará la corrida de Mari Carmen Camacho. ¿Es una garantía?–Es de encaste Núñez, que últimamente se ha quedado un poco fuera del circuito. Es una ganadería que tiene muchos años y que ha cosechado éxitos muy importantes, incluso en Madrid. Me gusta este hierro, tiene cierta solera.–Usted es un torero muy del agrado de la afición de Las Ventas. El día 15 sería un buen día para despegar de nuevo.–No me preocupa ese sufrimiento de si toreo o no... yo aspiro a torear a gusto y a llevarme esas satisfacciones. Torear en Madrid va a ser una de esas satisfacciones. –Son ya 26 años de alternativa. ¿En qué momento está?–Cuando tomé la alternativa, Manolo Váquez llevaba 35 años de alternativa y Curro Romero 27... esas cosas las tengo en cuenta porque pienso que una de las cosas bonitas del toreo es que no tiene edad. Todos los toreros se acaban asolerando con los años, incluso los toreros que torean regular. Pese a que son 26 años de alternativa me siento joven.–Hace algunas temporadas pasó de estar en casi todas las ferias a dejar de sonar. ¿Fue como consecuencia de la gravísima cornada que sufrió en Jaén?–Es posible. En ese sentido, algunas empresas dejaron de llamar, o llamaban pero yo estaba comunicando... no sé. Por unas cosas o por otras sucedió esto pero yo siempre he seguido entrenando y preparándome.–Usted ya sabe lo que es salir a hombros en Madrid. ¿Es algo vital a estas alturas de su carrera? –Salir a hombros de esa plaza, celestialmente hablando, sabe a gloria. En cada momento de la carrera de un torero sirve de una manera o de otra. Para mí, abrir esa puerta grande es algo muy hermoso y emocionante... no hay más que ver la salida a hombros del maestro Esplá, ahí nos emocionamos absolutamente todos. –A parte de Madrid ¿qué más tiene este año?–Tenemos cosas apalabradas, cosas sin hacer aún. Pero es algo que no me influye, me vuelvo invulnerable a estas cosas.