Karzai exige a Washington el fin de los bombardeos

islamabad- El presidente de Afganistán, Amid Karzai, no sólo discrepa de Washigton en el número de muertos civiles, sino también en la efectividad de unos métodos de combate que, en su opinión, «no sirven para derrotar a los terroristas y provocan un gran daño político». Karzai no es el único que, desde la experiencia de pasadas guerras, se opone a los bombardeos aéreos. El presidente de Pakistán, Ali Asif Zardari, que libra una dura batalla por recuperar el control de los valles fronterizos con Afganistán, ha vuelto a repetir que los ataques aéreos norteamericanos no han tenido resultados positivos y sólo han servido «para agravar la situación en la zona». «Los afganos han sido hasta ahora muy tolerantes con los daños colaterales de los bombardeos, pero esta situación no va a durar. Los terroristas no son los pueblos y ciudades; no están en los hogares afganos», se quejaba Karzai a la CNN. Lo cual no es del todo cierto: dada la tremenda eficacia norteamericana en el combate nocturno, capaz de abatir a un hombre en plena oscuridad a tres mil metros de distancia, la insurgencia talibán se sirve de la población civil a guisa de escudos humanos. Toman las casas de los campesinos y se alojan en ellas sin permitir la evacuación de mujeres y niños. Así ocurrió en el último incidente en Farah, el más mortífero de los «errores» conocidos. El informe oficial norteamericano se justifica en que los talibanes habían consolidado sus posiciones en los municipios de Ganj Abad y Grani del distrito de Bala Bulok, donde cobraban tributos a los lugareños, además de lanzar ataques contra las fuerzas de seguridad en la carretera que comunica Farah con Herat. El gobernador provincial solicitó entonces una operación con el fin de desalojar a los talibanes de la zona. Durante los combates, que se registraron la noche del pasado lunes, los lugareños se refugiaron en sus hogares, pero los insurgentes tomaron las viviendas y dispararon desde ellas. Precisamente, el tipo de guerrilla que los talibanes han practicado siempre. Karzai lo sabe e intenta explicárselo a Obama.