Crítica de libros

«La creatividad nace de la pasión y del amor»

«Encuentro la felicidad con las mujeres. Si no hubiera mujeres en el mundo, no iría a trabajar», dice
«Encuentro la felicidad con las mujeres. Si no hubiera mujeres en el mundo, no iría a trabajar», dicelarazon

En plena revolución de ideas me topo con Rafael Galobart vendiendo sonrisas al sol.-Es especialista en vender la burra.-(Risas) En lo que soy especialista es en ser sincero. Realmente, no veo manipulación en el mundo de la publicidad. Para mí, la creatividad son ideas originales con valor y la publicidad, la buena, es un arte.-Hábleme de la creatividad.-Nace de la pasión y del amor. Hay determinados estados de ánimo que provocan la fertilidad de las ideas: si estás eufórico, con ataque de melancolía, triste, contento... Todo influye. Pero si hablamos de talento, creo que todos lo tenemos. Existe un creativo en cada uno de nosotros.-¿De qué depende?-De la elección de vida. Algunos prefieren acomodarse en vidas lineales. Otros, rompen con ellas y se lanzan a la revolución de las ideas al encontrar la publicidad.-¿Gobbles era un gran publicista?-¡Qué preguntita! Me está metiendo en un lío, pero sacaré mi vena de abogado. Nací en el 67, por lo que en esa época ya no se hablaba de él, no me tocó vivirlo.-Mójese...-(Risas)Debía de ser bueno cuando muchos estaban a favor de la Alemania nazi, en parte, gracias a esa propaganda que nacía de un «breafing» maquiavélico. Pero si me pregunta por la verdadera publicidad...-¿Dónde la encuentra?-En mi caso, en el amor y en la curiosidad. Ahora mismo estoy con usted y estoy con la antena en la conversación de al lado. -Pelín cotilla sí que es...-Me pregunto acerca de sus vidas, si son felices o no, si tienen caminos paralelos. Estoy todo el día buscando bombillas en mi cabeza. Las buenas campañas se me ocurren mientras duermo y en el mar.-¿Será la fertilidad del agua?-De vacaciones, mi cabeza está más abierta a la imaginación. Tal vez, la culpa la tenga el mar, que no tiene fronteras. Cuando navegas sin ruido –a vela, claro– y sin prisas por llegar, afloran las ideas.-¿Se las cantan las sirenas?-Me mandan mensajes de texto... Hay que tener cuidado con ellas. Acuérdese de que atrapan y luego no te dejan marchar. Aunque nada como bucear en la aventura.-Regáleme una. -La aventura es levantarte cada día y pasear sin rumbo, sentirte libre de candados sociales y tratar de ser feliz. ¿Sabe dónde encuentro la felicidad? Con las mujeres. Si no hubiera mujeres en el mundo, no iría a trabajar. Las mujeres me dan alegría: mi hija, mi madre, mis amigas... ¿Sabe lo que dice un haiku japonés?-Cuéntemelo-«Al ladrón se le olvidó la luna en la ventana. No se la puede llevar», pero sí contemplarla y quererla. ¿Qué le parece?-Se me escurre el corazón por la camisa... ¡Y ese no está en venta!