La hora de la verdad

Hace 23 años en España se comenzó a decir que el aborto era algo necesario para nuestra sociedad porque, según coreaban las feministas: «Nosotras parimos, nosotras decidimos». Por aquel entonces se difundió el bulo de que cientos de mujeres abortaban clandestinamente o tenían que viajar al extranjero para hacerlo. Este argumento quedó desmontado el primer año en el que se comenzó a aplicar la ley, con un número de mujeres abortando infinitamente menor que el de las que supuestamente lo hacían clandestinamente. El aborto se despenalizó en tres supuestos considerados límite, uno de los cuales, el referido al riesgo para la salud materna, se ha convertido en un coladero que permite que en España el aborto sea libre de hecho, y que los centros abortistas cometan a diario un fraude de ley con el que facturan unos 40 o 50 millones de euros al año. Ahora todo esto es agua pasada para nuestros gobernantes, la cifra de más de un millón de niños muertos resulta insignificante para ellos, y la ley ha quedado obsoleta. El Gobierno ha montado un circo para aprobar una ley que no iba en su programa electoral. Ante una posible ley que permitirá la eliminación de miles de seres humanos al año, no podemos permanecer impasibles. Es el momento de la verdad, nadie más lo hará por nosotros, nadie más lo hará por ellos. *Portavoz de Derecho a Vivir