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Bruselas

La UE descarta un plan de rescate para las economías del este

La cumbre de la Unión Europea rechazó hoy lanzar un plan de rescate para los países de Europa central y del este, aunque prometió medidas de apoyo puntual a los países que lo necesiten y en colaboración con las instituciones internacionales.La reunión informal de los jefes de Estado y Gobierno de la UE para tratar la crisis económica recalcó "la importancia de la estabilidad macrofinanciera en toda la Unión Europea", pero negó que Europa central y oriental sea una región necesitada de planes especiales a pesar de su delicada situación financiera."Reconociendo que existen claras diferencias entre los Estados miembros de la Europa central y oriental", los líderes de la Unión se declaran dispuestos a "revisar la asistencia ya facilitada"y a estudiar "medidas que ayuden a los países a hacer frente a los desequilibrios temporales", según la nota conjunta emitida por los líderes comunitarios.El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, afirmó que no se permitirá que la crisis genere dos niveles de países comunitarios, al subrayar que "la Unión Europea no es dos uniones ni tres, sino una".La cumbre confirmó que la ayuda a los bancos matrices en países del Oeste de la UE "no debe suponer ningún tipo de restricciones para las actividades de las filiales"en otros estados de Europa central y del este.Actualmente, Hungría y Letonia reciben ya ayuda de la UE, dentro de paquetes financieros puestos en marcha en colaboración con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), para contribuir a equilibrar su balanza de pagos.La abanderada del rechazo a un plan de rescate para las economías del conjunto de la región central y oriental fue la canciller alemana, Angela Merkel, quien dejó claro que las medidas deben ser caso por caso y en función de dónde surjan las necesidades.Merkel recordó que "la situación es bastante diferente de país a país", y puso el ejemplo de que algunos como Bulgaria y Eslovaquia disfrutan aún de cifras económicas positivas, por lo que "debemos tener mucho cuidado en no crear problemas que no existen".La jefa del Gobierno alemán también dio otra ducha de agua fría a las aspiraciones de algunos países de Europa central y del este de que se flexibilicen los criterios para la entrada en el euro, a fin de que algunos puedan acelerar la adopción de la moneda única como refugio ante la tormenta económica y financiera."Creo que los criterios tienen que ser respetados", afirmó la jefa del Gobierno alemán, para quien esos criterios "fueron bien pensados"en su momento.Antes de la reunión, el primer ministro húngaro, Ferenc Gyurcsany, había reclamado un plan de ayuda para los países del centro y este de Europa, con una dotación de entre 160.000 y 190.000 millones de euros, que les permitiera superar la grave crisis financiera.Polonia, el país más importante del centro y del este de la UE, también rechazó un plan general para la región:"Hay que reconocer esas particularidades y solucionar casos específicos, pero no es necesario un plan para apoyar a Europa del este", recalcó, el ministro de Asuntos Europeos de Polonia, Mikolaj Dowgielewicz.Polonia organizó y acogió un encuentro previo de los nueve países de Europa central y del este, tras el que insistieron en que, "en tiempos de crisis, es importante mantener la solidaridad paneuropea", según dijo el primer ministro polaco, Donald Tusk.El presidente francés, Nicolas Sarkozy, resaltó por su parte que la solidaridad de la UE con los países más afectados por la crisis "ya es una realidad", y puso como prueba a Hungría y Letonia.El pasado viernes, tres instituciones financieras internacionales: el Banco Europeo de Inversiones (BEI), el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (BERD) y el Banco Mundial, anunciaron una ayuda a esa región, especialmente para el sector bancario, por 24.500 millones de euros para los próximos dos años.La cumbre insistió hoy en ese camino, al señalar la importancia del BEI para facilitar financiación a esa región.