Automovilismo
Le Mans revalida a los diésel
A la tercera fue la vencida. Peugeot ha conseguido el reto de triunfar en la carrera más dura del mundo, las 24 Horas de Le Mans. Y lo ha hecho con su modelo 908 HDi FAP, un prototipo especialmente diseñado para esta exigente competición y con un piloto español en el equipo de tres conductores, que han sabido llevar al coche francés hasta la victoria. Marc Gené es uno de los mejores volantistas españoles, que compagina su efectividad en Peugeot con el trabajo de probador dentro del equipo Ferrari de Fórmula 1. Gené, en una carrera impecable, logró alzarse hasta la cabeza de la prueba a las pocas horas de la salida, es decir, el mismo sábado por la tarde. Y, desde ese momento, ya no abandonó la primera posición hasta que, a las tres de la tarde del domingo, cayó la bandera ajedrezada.No es la primera vez que la marca francesa consigue el triunfo en esta prestigiosa prueba. En la década de los noventa, los Peugeot, entonces bajo la dirección deportiva de Jean Todt, que posteriormente dirigiría el equipo F-1 de Ferrari, consiguió doblegar el dominio de los Mercedes y Porsche, imponiéndose a la tecnología alemana. Ahora se ha dado un caso parecido, ya que dos Peugeot atravesaron la meta por delante del Audi R15, también con tecnología HDi. Con ello rompía la racha de siete ediciones seguidas en las que la marca de los cuatro aros se había adjudicado la victoria.Sin fallosA diferencia de otras ediciones, el equipo Peugeot funcionó a la perfección. Si el año pasado un error en la elección de neumáticos bajo la lluvia les privó del triunfo, en esta ocasión no hubo fallos y las diferencias de los coches franceses, superiores a los alemanes en las largas rectas del circuito, fueron suficientes para neutralizar todos los esfuerzos de los Audi más veloces. La tecnología diésel ha vuelto a imponerse, demostrando que las nuevas tecnologías HDi resultan igual de rápidas que los motores de gasolina y, gracias a su menor consumo, consiguen ganar tiempo en los boxes. Un detalle fundamental dentro de una competición de larga duración. El menor sonido de sus motores es otra ventaja, aunque se plantea en el futuro un reglamento que sea menos punitivo para las mecánicas de gasolina que, como en el caso de los Aston Martin, quedaron demasiado relegadas de la lucha por la victoria.
✕
Accede a tu cuenta para comentar