Los antidisturbios de los Mossos deberán ir identificados por decreto

El pasado 18 de marzo los Mossos d'Esquadra llegaron a cargar indiscriminadamente en varias ocasiones contra universitarios anti-Bolonia en protesta por el desalojo de la UB.

Un pequeño pero gran detalle desató duras críticas contra el cuerpo policial: ninguno de los agentes antidisturbios llevaba adherida en su uniforme la tira adhesiva con su número de identificación profesional (TIC), por lo que fue imposible reconocer públicamente a los agentes que utilizaron la violencia contra los estudiantes y muchas de las denuncias impuestas han quedado archivadas.

En un lugar visible

Esta situación ya no se volverá a repetir. A partir de mañana, todos los agentes de la Policía Autonómica, a excepción de los que vistan de gala, deberán llevar su número de identificación en un lugar visible de su uniforme. Así se establece en un decreto del Govern que se emitió el pasado 4 de noviembre, pero que no ha podido llevarse a cabo porque implicaba un periodo de adaptación de seis meses y un día.

El Diari Oficial de la Generalitat publicará el 12 de mayo el decreto, que modifica el reglamento a raíz de una orden interna dictada por el entonces director de la Policía Autonómica, Rafael Olmos.

La cabeza de turco de las escenas de violencia que se vivieron el pasado mes de marzo –Interior decidió destituirlo por la polémica que suscitaron las cargas– instó a este cambio para «profundizar en la voluntad de facilitar a los ciudadanos el ejercicio del derecho a poder identificar en todo momento a los policías».

Desde el año 2003, el Govern ya obligaba a los agentes a llevar su identificación en los uniformes de trabajo operativo, pero dejaba fuera, ente otros, a los antidisturbios

El decreto, no obstante, no satisface a todo el mundo pues los agentes deberán llevar su número de identificación personal en un lugar visible –con la cinta adhesiva– y no con una impresión fija de su número en el casco, tal y como hacen muchos países europeos.

Muchos sectores pro derechos humanos consideran, informa Efe, que la medida se queda corta porque los antidisturbios podrían verse tentados a retirar la cinta adhesiva en posibles cargas.