Revuelta del laborismo para forzar la dimisión de Brown

No hay marcha atrás. La revuelta del laborismo ha empezado y parece más que improbable que Gordon Brown siga al frente de la formación de cara a las próximas elecciones generales. El primer ministro vive la semana más crítica desde que llegó al poder hace justo ahora dos años. Con los pésimos resultados que se espera que coseche su partido en las elecciones locales y europeas que hoy tienen lugar en Reino Unido, el «premier» preparaba una reforma total de su gabinete para salir del bache. Sin embargo, sus planes se han visto truncados con la dimisión de hasta seis miembros de su Gobierno en menos de 72 horas y la publicación de una petición firmada por 50 diputados para echarle de Downing Street.
El rotativo «The Guardian» reveló ayer un concienciado plan elaborado por los rebeldes del partido para deshacerse de Brown y dejar antes de las vacaciones de agosto un nuevo líder acoplado en el número 10. Según el periódico, 50 laboristas han escrito ya a una dirección electrónica respaldando el complot y todo apunta a que antes del viernes podrían ser fácilmente 80. Detrás de la maquinaria podrían estar un miembro del Gobierno y dos antiguos colegas. Según el diario británico, los cabecillas de la trama son conscientes de que la falta de organización frena a muchos para pedir la cabeza del «premier» y por eso han elaborado un exhaustivo calendario que desde el 4 de junio hasta el 21 de julio enumera todos los acontecimientos necesarios para que tenga lugar la transición. Si con Tony Blair hicieron falta 45 días para sacarle del poder, con Brown 22 serían suficientes. Tal y como matizó el medio responsable de la primicia, los rebeldes están muy molestos con el hecho de que sus planes hayan salido a la luz antes de tiempo, ya que su intención habría sido hacerlos públicos el lunes para no perjudicar aún más al Laborismo de cara a las elecciones locales y europeas. Los resultados definitivos de estos comicios se darán a conocer el viernes y domingo respectivamente, pero los últimos sondeos dejaban al partido del Gobierno como tercera fuerza política, situación que no se vivía desde 1987. La publicación de la revuelta interna coincidió ayer con la dimisión de la titular de Comunidades, Hazel Blears. La ministra era una de las más afectadas por el escándalo de los gastos de los diputados. Brown le habría pedido que aguantara hasta el lunes, día previsto para anunciar la reforma del Gobierno, pero la mala relación que tenían debido a unas críticas que Blears hizo públicamente sobre el «premier» le habría llevado a dejarle colgado. Sólo 72 horas antes, la ministra del Interior Jacqui Smith había anunciado también su renuncia.
Con toda la tensión, el ministro de Sanidad, Alan Jonhson, visto por todos como sucesor del «premier», se ha convertido en centro de todas las miradas. Pero éste ratificó ayer su apoyo a Brown y dijo que era el «hombre indicado para el puesto».
 

El inoportuno halago de zapatero al «premier»
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, salió ayer en defensa de Gordon Brown con un artículo en «The Guardian» en el que alaba la «visión» y el liderazgo del «premier» para sentar las bases de una nueva «gobernanza económica global». El texto repasa la renovación del proyecto europeo y el consenso alcanzado durante el G-20 el pasado mes de abril, donde Zapatero estuvo presente gracias a la invitación del líder británico. «Supo ver y liderar desde el primer momento» la necesidad de dar una «respuesta internacional coordinada» a la «primera gran crisis de la globalización», afirma el presidente del Gobierno. Desde Moncloa defienden que el artículo tenía que salir antes de las elecciones europeas y que el hecho de que haya coincidido con la crisis que vive el Laborismo es tan sólo una cuestión de casualidad. Pero lo cierto es que, con toda la tormenta que recae sobre el «premier», las palabras de Zapatero no han podido venir en mejor momento.

 
La conspiración: el plan, paso a paso

4 de junio
- Los británicos están convocados a las elecciones europeas y municipales.
7 de junio
- El recuento de los votos confirma la mayor derrota del Partido Laborista.
9 de junio
- El actual primer ministro se ve obligado a dimitir.
29 de junio
- Elección del nuevo líder.
2 de julio
- Brown anuncia oficialmente su dimisión.
12 de julio
- Primera rueda de prensa del nuevo «premier».
21 de julio
- Empieza el parón estival del Parlamento tras haber zanjado la crisis.