«Soy médico y paciente de cáncer»

-Veo que sigue al pie del cañón, trabajando¿ -Quedarme en casa sería un problema, no una solución. Mientras pueda, vendré a trabajar cada día. El cáncer no es una buena noticia, pero lo afronto con buen ánimo. -¿Cuál es su pronóstico? -Hoy la mayoría de los cánceres se curan, y hay grandes esperanzas médicas para el futuro. Pero ahora mismo estoy enfermo y en tratamiento. Estamos intentando que la enfermedad se mantenga frenada el mayor número posible de años. -¿Aporta algo positivo el cáncer? -No es que uno lo quiera¿ Pero, con la enfermedad, me he hecho más adulto. Ahora integro la muerte como parte de mi experiencia humana. Y tengo un acercamiento más espiritual a la vida. La sensación de estar en paz con uno mismo y con su entorno es impagable. -Entonces, con el cáncer se puede evolucionar¿ -Puede aprovecharse para aprender en la adversidad. Una vez aceptada la noticia, descubres un estado de normalidad nuevo. Conviene no sucumbir al desánimo: hago mucho deporte y me mantengo activo. Lo malo es dejarse vencer por el miedo o la depresión. -A veces, los médicos no se afanan en dar ánimos. -Tenemos los médicos mejor formados y una tecnología impresionante. Pero necesitamos complementarlo con medicina basada en la afectividad. -Entonces, ¿la tecnología deshumaniza? -La tecnología ha traído una pérdida en contacto humano con el paciente. El gran desafío de los médicos es recuperar esa dimensión humana. -¿Y no será que la vida se está medicalizando? -En la organización sanitaria actual se prima la productividad. Los médicos necesitarían más tiempo para estar con el paciente. El médico debería ser también una especie de tutor que sepa desplegar su empatía hacia el enfermo. -Para ello, le habrá servido pasar por su enfermedad. -En mi caso se juntan dos experiencias: soy médico y paciente de cáncer. Se aprende más como paciente que como médico. Ahora puedo entender mucho más a mis pacientes, y puedo aconsejarles mejor. Los enfermos agradecen mucho que les dé mi testimonio personal: el factor psicológico es fundamental. -¿Qué lugar ocupa la psique en el desarrollo del cáncer? -Hay una relación directa entre cáncer y tabaco, pero no creo que haya una relación entre cáncer y enfermedad psicosomática. Por otra parte, tengo la impresión personal de que si el paciente se muestra optimista y activo, vive mucho mejor y alarga su vida. -Juega en contra la sensación de que el cáncer es un estigma social. -Sí, hay muchos pacientes que se sienten estigmatizados. A veces, la familia te protege tanto que te aísla. Otras veces, la negatividad que acompaña a la palabra cáncer hace que el paciente lo viva como una cruz. Hay que cambiar esa mirada por otra: el enfermo de cáncer es un luchador que necesita y ofrece humanidad.