«Un Goya abre más puertas que un apellido»

D ebutó en esta profesión de la mano de Almodóvar, como hija de Carmen Maura en «La ley del deseo», y tuvo su primer gran reconocimiento en 2007, con el Goya a la mejor interpretación femenina por «REC». Entre medias, fue presentadora durante cinco años de «Los 40 Principales» y «Del 40 al 1», en Canal +, y, desde 2005, conduce los fines de semana «Cuatrosfera», en Cuatro. Ahora ya ha dejado de ser la sobrina de Concha Velasco, para convertirse en Manuela Velasco, y con su nombre participa en «La chica de ayer», la serie que estrena Antena 3 el próximo domingo. -¿Qué hace una mujer en una comisaría en 1977? -Digamos que soy una marginada a la que no tienen muy en cuenta, la que lleva los cafés a los hombres, hasta que llega Samuel. -Samuel, don Ernesto Alterio, es mucho Samuel... -Digamos que lo que diferencia esta serie del resto es que todo se ve desde su punto de vista. El caso policial no es nunca lo más importante, sino la historia de Samuel. -¿No será otra historia de España, al estilo «Cuéntame»? -No, no es un relato histórico de la época, aunque se reflejan en la serie esos tópicos de entonces, como que la mujer no podía ser policía, el machismo más rancio, la fobia a los homosexuales... -¿Igualará en calidad y en detalles a «Cuéntame»? -La calidad de esta serie no sólo la defendemos los actores fijos sino incluso los episódicos. Todos los que vienen nos dicen que se hacen muchas tomas, que parece cine. La verdad es que en pocos sitios nos han dejado probar y ensayar tanto a los actores como en esta serie. -Usted casi empezó en esa época su carrera como actriz, con apenas nueve años, en 1986, con «La ley del deseo». -La verdad es que ha llovido mucho desde entonces, y casi todo para bien. -En lo que a su carrera se refiere, ¿ha ido más deprisa o más lentamente de lo que esperaba? -Quizás más despacio de lo que yo hubiera querido, pero la verdad es que he tenido mucha suerte, pues me siento una privilegiada al haber hecho cosas interesantes. -Las personas como usted que nacen en un ambiente como éste, ¿nacen ya siendo actrices o también tienen que hacerse? -Yo estudié cinco años en la escuela de Juan Carlos Coraza y creo que la formación es necesaria, porque ahí es donde empiezas a conocerte y a perder el miedo. -¿Es de las que siendo pequeñita decía que de mayor quería ser actriz? -La verdad es que sí, aunque que hubo una época en la que me aparté un poco, pero afortunadamente lo retomé. -¿El apellido Velasco le ha abierto muchas puertas? -Ni me ha abierto ni me ha cerrado ninguna puerta. Gracias al apellido conocí este mundo por dentro desde muy pequeña, pero yo me he tenido que buscar la vida solita. -¿Y el ganar un Goya? -Desde luego ayuda mucho más ganar un Goya. Este premio sí te abre más puertas, porque los directores de «casting» cuando menos ya piensan en ti para determinados proyectos, como ha sido en mi caso este, por muchas pruebas que luego haya tenido que pasar. -¿El caché también sube al ganar un premio así? -Desgraciadamente, al menos en mi caso, el caché no ha subido nada por el momento. -¿La TV es ahora mismo el gran refugio de los actores? -Digamos que la cosa está muy difícil, porque somos muchos los que intentamos vivir de esta profesión, y además hay mucha gente con talento, por lo que quizás haya más trabajo ahora en la pequeña que en la gran pantalla, aunque a veces hay proyectos que no te interesan. -No me diga que es de las afortunadas que incluso pueden rechazar algún proyecto. -Es que puedes y debes rechazar alguno. Desde que gané el Goya dije que no a varias cosas porque no me veía en ellas, porque creía que otros lo podrían hacer mejor. -Estando su tía en «Herederos», ¿no le han llamado nunca para trabajar en esa serie? -La verdad es que sí, querían que hiciera un personaje en la tercera temporada, pero fue justo cuando me habían propuesto también esta serie con Antena 3 y como me gustó tanto la versión inglesa me quedé aquí. -¿Se imagina que este proyecto sea un «REC televisivo»? -Sería una alegría muy grande. Nadie esperaba que la película tuviera ese éxito, y, en cambio, ahora todos estamos convencidos de la gran calidad de la serie.