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Juan Duyos: En busca del erizo perfecto

Juan Duyos: En busca del erizo perfecto
Juan Duyos: En busca del erizo perfectolarazon

Su Selfireceta: Erizos al limón. Le «flipan» los arroces melosos, aunque su perdición está en las aguas turquesas de Menorca

Su Selfireceta: Erizos al limón

Ingredientes:

- Erizos a discreción, depende de la suerte y dedicación de cada uno para pescar más o menos ejemplares.

-Buenos pulmones

-Un tenedor

-Limón

-Mucha energía

La elaboración:

Es uno de los platos más sencillos de preparar. Una vez que los hemos pescado, los ponemos al sol, los echamos limón... ¡y listo». Es un placer poder comerlos a la orilla del mar. Y si es en Menorca... no tiene precio.

Somos lo que comemos. Nunca una expresión prefabricada tan manida se ha ajustado tanto a la realidad. Naturalidad es lo que derrocha Juan Duyos. No sólo en sus creaciones sobre la pasarela, sino en su día a día. Y, como no podía ser menos, es lo que este madrileño prefiere poner sobre su mesa. «Me gustan las comidas fáciles, naturales y con poca literatura», afirma. En ocasiones nos empeñamos demasiado en recargar y adornar la realidad con la intención de dotarla de un contenido un tanto incierto y un continente llamativo. Pero ahí están personas como Duyos para bajarnos a la tierra y ver dónde está el meollo del asunto.

A Juan, una de las cosas que más le gusta hacer en verano es perderse en el mar en busca de erizos. No es tarea sencilla, pero la recompensa merece la pena. «Luego me encanta comérmelos al borde del mar, ahí mismo, con limón, sol y buena compañía», explica con entusiasmo. Su relación con la cocina viene de antaño. Se cuela entre fogones día y día, «cocino a diario», asegura mientras subraya que además es de buen comer». Aprovecho todas las estaciones del año. Una de las cosas con las que disfruto mucho es utilizar los productos de cada temporada. Aunque la verdad es que no como más en verano. Como bien todo el año», confiesa.

Desde pequeño, Juan estuvo muy pendiente de lo que tanto su madre como sus tías hacían en la cocina. Fue de ellas de quien heredó esa pasión por los fogones, siempre unida a la creatividad que siempre le ha caracterizado. «Aunque la verdad es que también soy muy autodidacta», matiza. Ahora, en pleno proceso de producción de la nueva colección que presentará en septiembre en la MBFW de Madrid, Duyos decide escaparse unos días a Menorca para coger fuerzas y encerrarse para le recta final. Desde allí envía a LA RAZÓN un «selfie» tumbado en la roca tras haber pescado unos cuantos erizos. Antes de dar el primer mordisco nos cuenta que su preparación no es lo más laborioso, sino localizarlos. «Se necesitan buenos pulmones», afirma. Aunque reconoce que tiene el corazón dividido, porque no puede renunciar a los arroces. «Me flipan los melosos, los negros, a banda, al horno, socarrats...», asegura. Además de catarlos, los cocina. «Me salen muy bien y mis amigos me lo piden todo el rato», dice entre risas. Y una vez más insiste en que lo importante para elaborarlos es elegir buena materia prima. El producto. «Utilizo cabezas de pescado para el caldo. Cebolla, tomate, aceite de oliva, ajo y sal para el sofrito y luego una sepia generosa troceada, cigalas y berberechos. ¡Ésta ha sido mi última combinación ganadora! No puede olvidarse una pizca de azafrán, pimentón picante y un buen arroz bomba», describe el diseñador, quien antes de concluir recuerda: «Sírvase meloso». Un artista.

Mi restaurante favorito

«Me encanta Torralbenc, en Menorca, en una antigua finca agrícola cerquita de Alaior. Paco Morales selecciona los mejores productos locales y tiene una carta de vinos».