Las empresas familiares prevén mantener o incrementar el empleo en Castilla y León

Más del 98 por ciento de los empresarios familiares de Castilla y León prevé mantener o incrementar la facturación y el empleo a lo largo de este año, lo que supone un incremento de cuatro puntos porcentuales respecto a las estimaciones del año anterior. Así se desprende del sondeo anual que Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL) realizó a sus 151 asociados durante la reciente celebración de su asamblea general.

Según este informe, el 97 por ciento de los empresarios estima que igualará o incrementará su cifra de negocio este año frente al 95,7 por ciento que así lo creía durante el año pasado, además de que la totalidad de los encuestados asegura que su plantilla se mantendrá o aumentará en este ejercicio, es decir, un 6,5 por ciento más de las que tenían esta previsión el año pasado.

A pesar de estas optimistas previsiones, los empresarios familiares no modifican su visión sobre la situación económica nacional y regional, que obtienen casi la misma valoración que el pasado año, con un aprobado justo con 5,4 puntos y 5,1 puntos sobre diez, respectivamente.

Lo que sí suspende es la política económica promovida por la Junta de Castilla y León durante los últimos tiempos, que sólo obtiene una calificación de 3,9 sobre diez.

La capacidad de la clase política es la principal preocupación para el 82 por ciento de los encuestados, seguida muy de lejos por la situación en Cataluña (un 9 por ciento) y la corrupción (6 por ciento).

Eliminar autonomías

Por otra parte, el 64 por ciento de los empresarios se muestra partidario de eliminar el sistema autonómico de España, frente a un 24 por ciento que lo dirigiría hacia un nuevo sistema federal. Únicamente, el 12 por ciento de los participantes en esta encuesta se muestra conforme con su configuración actual.

De la misma manera, aumenta la percepción negativa que tienen los empresarios de la burocracia como traba para el desarrollo de los negocios. En este sentido, el 70 por ciento de los encuestados, tres puntos más que el año anterior, afirma que su empresa dedica más del 20 por ciento de su tiempo a cumplir con los respectivos trámites con las administraciones.

Y respecto a la equiparación de salarios entre hombres y mujeres, el 91 por ciento de los empresarios familiares afirma que existe igualdad en su empresa en los sueldos en las mismas responsabilidades entre hombres y mujeres.

Mayor fomación

La formación es otro de los aspectos por los que los empresarios familiares mostraron su preocupación en la encuesta y calificaron con un 5,6 la de los jóvenes que se han incorporado a sus empresas en los últimos años, y con un tres el grado en el que las universidades responden a las necesidades de las empresas. En este sentido, un 7,2 por ciento consideró una prioridad la potenciación de la Formación Profesional Dual, plan formativo que el 57,6 por ciento afirmó conocer.

Por último y aunque aumenta ligeramente, sigue siendo negativa la valoración de la imagen que tiene la sociedad sobre el empresario, pasando de obtener 4,4 puntos el pasado año a 4,8 en este sondeo, y se mantiene estable en el caso del empresario familiar, que vuelve a obtener una calificación que roza los seis puntos sobre diez.

El pasado mes de marzo, César Pontvianne recogía el testigo de su antecesor, José Miguel Isidro, para convertirse en nuevo presidente de Empresa Familiar para los próximos dos años, en los que apostará por fomentar la representación ante las administraciones en la función de lobby y por aumentar el tamaño medio de las empresas familiares, al tener una baja facturación.