Las personas con TDAH tienen ocho veces más probabilidades de consumir cannabis

Un estudio liderado por el Vall d'Hebron revela que hay una base genética que aumenta el riesgo de adicción.

Denis Reina empezó a fumar cannabis y a beber alcohol con sólo 13 años. A los 15 consumía cocaína. Era mal estudiante, tenía problemas en las relaciones sociales y días difíciles con la familia. Aunque las madres son incondicionales y la suya insistía en que a su hijo le pasaba algo más allá de tener problemas con las drogas. Estaba en lo cierto. A los 21 años le diagnosticaron un Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). Y ahora, con 31 años, acaba de saber que las personas con TDAH tienen ocho veces más probabilidades de consumir cannabis en algún momento de su vida que el resto. En parte, es cuestión de genes. Resulta que hay una base genética compartida entre ambos trastornos que aumenta este riesgo de adicción.

Denis es uno de los 85.000 pacientes que han participado en un estudio multicéntrico liderado por el equipo de Psiquiatría, Salud Mental y Adicciones del Vall d'Hebron Instituto de Investigación (VHIR) que por

primera vez constata que las personas con TDAH tienen más predisposición genética de consumir cannabis.

Este estudio ha sido posible gracias al Big Data que aquí y ahora está revolucionando la ciencia. Científicos de diferentes disciplinas –matemáticos, biólogos y médicos–, tras analizar el genoma completo de 85.000 individuos, han descrito que hay un 29 por ciento de solapamiento genético entre el TDAH y el consumo de cannabis, esto quiere decir que un 29 por ciento de la base genética que predispone a desarrollar TDAH también predispone a fumar. Los investigadores han descrito también cuatro nuevas regiones genéticas asociadas a ambos trastornos.

«Estos resultados validan científicamente una hipótesis clínica, que los pacientes con TDAH consumen más cannabis que el resto de la población», explicó el doctor Josep Antoni Ramos Quiroga, jefe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Vall d'Hebron. Mientras que el consumo de cannabis entre la población es de un 13 por ciento, el 40 por ciento de los pacientes con TDAH consume marihuana. Los médicos sospechaban que un diagnóstico de TDAH aumenta significativamente el riesgo de consumir drogas. Pero se desconocían los factores que determinaban esta relación.

El trabajo publicado en la revista «Molecular Psychiatry» confirma ahora sus hipótesis. Estudios anteriores realizados con gemelos habían demostrado que tanto el TDAH como el consumo de cannabis tienen una base genética. El 75 por ciento del TDAH y entre el 40 y 50 por ciento del consumo de cannabis tiene factores genéticos.

Terapia de prevención

A efectos prácticos, la doctora Marta Ribasés, investigadora principal, destaca que estos resultados permitirán realizar un trabajo de prevención de consumo de cannabis y otras drogas en niños con TDAH. Y a

la inversa, delante de pacientes con adicciones realizar un «screening» para descartar TDAH.

Pero para poder prevenir, hay que diagnosticar cuanto antes mejor. El objetivo es evitar historiales como las de Denis. «Saber lo que me pasaba ha sido una enorme tranquilidad para mí y para mi familia», cuenta. La doctora Vanesa Richarte constató que los pacientes con TDAH como Denis se inician en el consumo de cannabis antes que la media, a los doce años. Y alerta de que fumar marihuana resulta perverso para personas con estos trastornos porque aumenta su déficit de atención e inestabilidad emocional. Propone un abordaje a tres bandas: psicológicamente, en la escuela y dependiendo de los síntomas con fármacos.

Ttras participar en la elaboración del primer mapa genético del TDAH y demostrar la relación genética entre el consumo de cannbis y la esquizofrenia, el siguiente paso de los investigadores será analizar la

correlación genética entre el TDAH y la cocaían. La doctora Ribasés confirmó que se está iniciando un estudio con 3.000 pacientes.