Cataluña

Sin tasa turística

La Generalitat descarta ceder a Barcelona el impuesto y el Ayuntamiento seguirá gestionando un 33 por ciento de los ingresos que genera la tasa.

La primera reunión sobre la gestión de la tasa turística terminó sin acuerdo.
La primera reunión sobre la gestión de la tasa turística terminó sin acuerdo.larazon

La Generalitat descarta ceder a Barcelona el impuesto y el Ayuntamiento seguirá gestionando un 33 por ciento de los ingresos que genera la tasa.

Nones. Las transferencias en Cataluña funcionan del Gobierno a la Generalitat. De la administración catalana al Ayuntamiento de Barcelona no se puede esperar lo mismo. La recaudación de la tasa turística, por lo tanto, se va a quedar mayoritariamente en las arcas de la Generalitat. Ayer celebraron una reunión entre las dos administraciones y el resultado responde a aquello de la vida sigue igual. Barcelona seguirá gestionando apenas un 33 por ciento de lo que genera con esta tasa.

Es decir, el Ayuntamiento recibe actualmente un 33 por ciento de la recaudación de Barcelona, en la que se generan 22,2 millones del total de 43,5 que se recaudan en toda Cataluña, mientras que la ciudad recibe de ellos 7,5, a los que se sumaron otros dos en 2015 en una aportación extraordinaria.

Tras la reunión, el secretario general de Empresa y Conocimiento de la Generalitat, Xavier Gibert, afirmó que no está en los planteamientos del Govern aumentar la participación de los ayuntamientos en el reparto de la recaudación de la tasa turística, pese a la reivindicación del 100% que reclama Barcelona y que el Consistorio puso ayer sobre la mesa en la primera reunión del grupo de trabajo sobre este impuesto.

Gibert explicó que el impuesto ya establece un elemento diferencial para Barcelona y que la Generalitat cree que «puede haber muchos ámbitos de colaboración que no tienen que pasar necesariamente por el incremento de recaudación o participación» de los ayuntamientos en el impuesto turístico, que, recordó, se creó con visión global de país y de solidaridad y redistribución para el conjunto del territorio, aunque la ciudad de Barcelona es la que genera la mitad de los ingresos.

El segundo teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, celebró el inicio del diálogo que supone el grupo de trabajo de la tasa turística, aunque lamentó que Govern y Ayuntamiento partan de puntos de vista diferentes. Colboni incidió en que la fiscalidad es un punto clave para hacer el turismo “sostenible y compatible con la convivencia en la ciudad”. Opinó que hay buena voluntad, con la que confía en llegar a un acuerdo en favor de un modelo de turismo sostenible para la ciudad y Cataluña.

Confortabilidad

En cualquier caso, el secretario general de Empresa mostró su disposición, compromiso firme y vocación de colaboración del Govern para encontrar un «espacio de confortabilidad» ante los problemas que considere el Ayuntamiento de la capital catalana, con el objetivo de que el turismo continúe siendo un motor de crecimiento económico y empleo. Auguró que el grupo de trabajo podrá ofrecer, en sus palabras, soluciones factibles hacia finales de año y consideró que el debate puede incluir «una reflexión sobre la fiscalidad, pero el impuesto no es solo tarifas». También descartó crear un gravamen para quienes visitan la ciudad pero no pernoctan: «En estos momentos no nos estamos planteando, desde el punto de vista del impuesto, una fiscalidad en este sentido».