El aguacate triunfa en la Comunitat

La demanda de aguacates en la Unión Europea es alta y la calidad de la producción de la Comunitat Valenciana es reconocida. El aguacate se adapta muy bien a las zonas citrícolas donde no hay riesgos de heladas y en esta región hay mucha superficie con estas características. Es un cultivo con pocas necesidades de mano de obra, por lo que los costes de producción no son elevados. Y, además, el agricultor tiene un amplio margen para recolectar la fruta ya que una vez maduro aguanta muy bien en el árbol.

Estos son los principales argumentos que destacó el responsable del departamento de Fruticultura de la Estación Experimental Cajamar «Las Palmerillas» de Almería, Juan José Hueso, durante la segunda conferencia de las XXXV Jornadas de cítricos y cultivos alternativos de Caixa Rural Torrent.

Durante la charla, que trató sobre «El aguacate y otros cultivos subtropicales de interés para la zona», Hueso subrayó que España es el primer productor de aguacate de la Unión Europea, con un cultivo de alrededor de 10.500 hectáreas y una producción de entorno a 100.000 toneladas que se concentra fundamentalmente en Málaga y Granada.

En la Comunitat Valenciana, los datos oficiales hablan de más de 150 hectáreas de cultivo, principalmente en Alicante, aunque en Valencia hay ya más de 50. Cuando la superficie de cultivo va en aumento, es porque está siendo rentable, aseguró el representante de «Las Palmerillas», que estuvo acompañado por el vicepresidente de Caixa Rural Torrent, Vicente Comos, y por la responsable del Fondo de Formación y Promoción Cooperativa de la entidad, María José Mora, entre otros.

Respecto al conjunto de variedades subtropicales que actualmente se cultivan en España, como son el aguacate, la chirimoya, el mango y el níspero, el ingeniero agrónomo e investigador señaló que «el aguacate es el que tiene mayor interés y expectativas».

Indicó que especies como la chirimoya también serían viables en la Comunitat Valenciana, pero la corta vida postcosecha de estos frutos y la necesidad de la polinización artificial limitan su expansión más allá de la costa granadina.

Otros como el mango están dando unos resultados espectaculares y se han extendido muchísimo en los últimos años (ya hay más de 5.000 hectáreas en España) pero, sin embargo, son muy exigentes en clima y sólo algunas zonas privilegiadas, quizás del sur de Alicante, podrían producirlo.