Al estreno del nuevo Wanda Metropolitano, en transporte público

A falta de tres semanas para la puesta de largo del nuevo estadio rojiblanco, los aficionados se enfrentan a las dudas de cómo desplazarse ese día: los accesos y las plazas de aparcamiento siguen en el aire.

La cuenta atrás se acerca a su fin: el próximo 16 de septiembre el balón echará a rodar en el Wanda Metropolitano, el nuevo hogar del Atlético de Madrid. El equipo rojiblanco y la constructora FCC se afanan en terminar los últimos detalles para que todo esté preparado. Sin embargo, hay un punto negro en la planificación que preocupa por igual a vecinos y aficionados: los accesos al estadio y las plazas de aparcamiento del barrio.

Según las estimaciones, cerca de 60.000 aficionados se desplazarán hasta el Wanda el próximo sábado 16. La mayoría lo harán en Metro. Es el caso de Jaime Rojo, abonado al equipo colchonero desde el año 2.000 que, en conversación con LA RAZÓN, explica que se acercará «en Metro al estadio» porque prefiere «no arriesgarse». Y es que apenas hay plazas de aparcamiento en los alrededores del coliseo. De acuerdo con el Atlético de Madrid, dentro de la parcela del Wanda Metropolitano podrán aparcar hasta 4.000 coches. Mil de estas plazas estarán bajo el terreno de juego. Las 3.000 restantes se encontrarán situadas en espacios anexos al recinto deportivo. Desde el Atlético de Madrid tranquilizan a los aficionados y aseguran que todas las plazas estarán operativas para la fecha en la que los jugadores del equipo rojiblanco pisen por primera vez el césped del estadio para jugar un partido oficial. Sin embargo, entre los vecinos, otro de los colectivos afectados, las sensaciones no son positivas. Desde la Asociación Propietarios Viviendas Polígono H de San Blas señalan que la llegada de miles de aficionados del Atleti y de otros equipos al barrio «va a ser criminal», porque, como explican «normalmente en el barrio ya hay problemas de aparcamiento porque hay muchos coches y pocas plazas». Ante este horizonte, no dudan en afirmar que «los días de partido se va a colapsar todo el barrio y va a ser imposible circular por aquí porque además de los vecinos vendrán los aficionados del Atlético».

A los vecinos no sólo les preocupa poder aparcar su vehículo, sino también llegar hasta su barrio. Y es que los accesos en coche al Wanda, a medio camino entre San Blas y Canillejas, se han transformado, conforme avanzan las obras, en un asunto extremadamente espinoso. El acceso desde la M-40 a la avenida de Arcentales es un punto negro de la circulación de la capital: «Los días de diario la avenida es un infierno, no nos queremos imaginar cómo será circular por aquí en cuanto se junte todo el mundo que va al estadio», explican los vecinos.

Por eso, cuando conocieron la noticia del traslado del Atlético se pusieron en contracto con el Ayuntamiento y con el club colchonero. Así, los vecinos recibieron la promesa de que se iban a construir «las vías colaterales para facilitar el acceso al estadio», pero, a poco menos de tres semanas para que el balón eche a rodar sobre el tapete verde, aún no hay nada construido. Y es que, explica la Asociación Propietarios Viviendas Polígono H de San Blas, «no se van a hacer hasta dentro de tres años».

Desde el Atlético de Madrid subrayan que va a estar casi todo listo para el día 16 de septiembre. Sobre los accesos, uno de los aspectos más delicados, pasan de puntillas. Explican que el Wanda Metropolitano es un estadio diseñado para ser puntero en Europa y que al ser el nuevo hogar de un club con una importante masa social no se plantean que los problemas de accesibilidad se perpetúen en el tiempo. Por eso, señalan que, según avance el tiempo, las entradas por carretera a las inmediaciones del estadio se irán perfeccionando y las vías colaterales acabarán por construirse.

Respecto a ello, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, recordó que se trata de un problema que compete a Fomento y al Ayuntamiento, aunque explicó que el Ministerio se dirigió al Gobierno de Manuela Carmena (Ahora Madrid) a principios del mes de agosto para solicitarle que hiciera un informe «preceptivo para continuar avanzando» y que este paso «todavía» no se ha llevado a cabo desde Cibeles. Pese a todo, Cifuentes reconoció que a ella le consta que Fomento desbloqueará el proyecto de los accesos al Wanda Metropolitano entre 48 y 72 horas después de haber recibido el informe del Ayuntamiento de Madrid.

Miedo a las peleas

Otro de los miedos de los vecinos se circunscribe al ámbito de la seguridad porque «aunque todos sabemos que la mayoría de gente que va al Estadio es pacífica, es probable que un grupo reducido pueda liarla como pasó el día del Deportivo de la Coruña», relata uno de los vecinos al recordar el día en el que los radicales del Atlético y del club gallego se enfrentaron en las inmediaciones del Vicente Calderón en noviembre de 2014 en una batalla campal que terminó con el asesinato de «Jimmy» Romero Taboada. Por eso, son varios los residentes de la zona que se plantean la mudanza. Según explica José María Gutiérrez, una profesional del sector inmobiliario que trabaja en la zona de San Blas, «Las Rosas es un barrio muy tranquilo, residencial, con urbanizaciones y eso los vecinos lo aprecian mucho», así, «es verdad que hay familias que están a la espera de ver cómo afecta la llegada del Atlético de Madrid al barrio para ver si se mudan o permanecen en el distrito».

Mientras tanto, el Atlético de Madrid, ajeno a esta polémica, sigue terminando los trabajos: termosellando la cubierta, instalando todas las butacas y preparando los alrededores para instalar dos espacios de encuentro para los aficionados, así como locales comerciales y bares.