Seguridad Vial

Un millón de multas de tráfico «a la basura» por estar mal tramitadas

La Razón
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Alrededor de un millón de multas de tráfico notificadas por el Ayuntamiento de Madrid en el último año a través del Tablón Edictal de Sanciones de Tráfico (Testra) podrían invalidarse, según denunció ayer la organización en defensa de los conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA). El problema es que la Dirección General de Tráfico (DGT) «olvidó» poner la fecha de publiciación en las notificaciones –según establece el Art. 6 de la Orden INT/3022/2010, de 23 de noviembre, por la que se regula el Tablón Edictal de Sanciones de Tráfico–, lo cual impide realizar el cómputo de los plazos legales, bien para pagar con descuento o bien para recurrir. De esta forma, según los servicios jurídicos de AEA, estas publicaciones pasan a ser «inválidas, ineficaces y sin valor legal alguno». Al no ser válidas, su recaudación ejecutiva, en caso de impago, resultaría inviable porque en los edictos que trataban de servir de notificación no constaba la fecha en que fueron publicados.

Por este motivo, más de un millón de multas podrían ir «a la basura», según los cálculos del organismo.

Además, la organización que defiende los derechos de los conductores informa de que en la Comunidad de Madrid existen otros 49 municipios que también han utilizado este medio «irregular» para notificar las multas impuestas en el último año, cuyo cobro ejecutivo es «de dudosa legalidad». De esta forma, a juicio de AEA, «cualquier automovilista madrileño podría oponerse al cobro ejecutivo de dichas multas por parte de la Agencia Tributaria de Madrid, o de cualesquiera otros servicios de recaudación, porque la necesaria notificación previa no se ha realizado correctamente».

Así, a juicio de los servicios jurídicos de AEA, los fallos en la publicación de edictos en el Testra abren también la posibilidad de pedir la revisión del expediente para aquellos automovilistas madrileños a los que se les haya cobrado ejecutivamente las multas mediante embargos, siempre que no hubieran recibido notificaciones por correo certificado o hubieran presentado algún escrito atendiendo la recomendación de los servicios de gestión de multas de determinadas compañías de seguros y «empresas quitamultas», ya que, según AEA, «con esta actuación lo único que han conseguido es convalidar unas notificaciones que eran de todo punto ineficaces».

Dudas desde el inicio

Testra es una página de internet desde la que cualquier ciudadano o empresa puede consultar las notificaciones de multas que no le han podido entregar en su domicilio. Tiene carácter legal y por ello desde el 24 de noviembre de 2010 se convirtió en el medio oficial de publicación de los procedimientos sancionadores de Tráfico. La DGT, como órgano gestor del mismo, es responsable de garantizar la autenticidad e integridad de su contenido. Desde su inicio, hace cinco años, AEA denunció irregularidades porque se estaba aplicando a expedientes sancionadores iniciados con anterioridad a su entrada en vigor y se estaban reduciendo los plazos que tenían los ciudadanos para formular sus correspondientes recursos.

A raíz de la denuncia de AEA, la DGT modificó el texto de las notificaciones publicadas. Más tarde, en octubre de 2011, AEA volvió a detectar irregularidades en el contenido de los edictos publicados ya que, dependiendo de la fecha en que se descargaban los ficheros, tenían diferente contenido. De la denuncia de AEA la Fiscalía de Madrid abrió una investigación.