El coronavirus ha afectado a 1.400 niños en España

La Asociación Española de Pediatría (AEP) celebra estos días el I Encuentro Digital de la Espacialidad, un congreso online con mil inscritos, bajo el título “¿Covid-19 como acelerador de la innovación en pediatría?“. Según ha informado, a lo largo del mismo se ha puesto de manifiesto el papel de una especialidad durante la pandemia, periodo en el que alrededor de 1.400 niños han sido diagnosticados con cuadros agudos. Cristina Calvo, pediatra experta en Covid-19 y portavoz de la AEP en esta epidemia, ha asegurado que esta nueva patología “ha afectado a nivel pediátrico a menos del uno por ciento del total de los casos diagnosticados en nuestro país”, lo que daría esa cifra de 1.400 contagiados. De ellos, “algo más de la cuarta parte han precisado ingreso hospitalario”.

Según la AEP, durante el desarrollo de esta pandemia son muchas las teorías surgidas en torno a las innumerables publicaciones realizadas sobre el SARS-CoV-2; sin embargo, todo proceso científico lleva su tiempo y aún es pronto para poder realizar afirmaciones cien por cien seguras. “Creo que la comunidad médico-científica ha aprendido mucho sobre este virus; sin embargo, aún se necesita analizar con detalle la cantidad ingente de datos que manejamos con objeto de seguir aprendiendo y encontrarnos más preparados de cara a posibles nuevos brotes epidémicos”, asegura la doctora Calvo.

A su juicio, otoño supondrá un nuevo reto asistencial, ya que es posible que “nos encontremos con la suma de infecciones habituales de los niños como virus respiratorio sincitial o la gripe, que habitualmente saturan los recursos sanitarios, junto a la Covid-19, por lo que será necesario redoblar esfuerzos. Creo que desde ya, y me consta que es así, tenemos que prepararnos para afrontar un posible rebrote, con todo lo que llevamos ya en nuestras mochilas aprendido”, afirma.

Los retos a los que se enfrentan los pediatras a corto plazo pasan por retornar y asegurar el cumplimiento riguroso de los calendarios vacunales y las consultas del niño sano en atención primaria, ofreciendo garantías de seguridad y prevención de nuevos contagios. En la pediatría hospitalaria estos retos podrían centrarse en mantener el altísimo nivel asistencial actual sin dejar que interfiera la Covid-19 en el abordaje de las patologías agudas, atención especializadas a las patologías crónicas y sin descuidar el diagnóstico precoz de nuevos casos de Covid-19″.