León XIV: de vacaciones a Castel Gandolfo

Castel Gandolfo vuelve a abrir sus puertas para convertirse en la residencia veraniega de un Pontífice. La Santa Sede dio a conocer este martes que León XIV pasará sus vacaciones en esta propiedad extraterritorial del Vaticano, con una superficie de más de 55 hectáreas.

León XIV permanecerá del 6 al 20 de julio, completando así dos semanas de descanso, donde no frenará en seco su actividad. El domingo 13 de julio celebrará misa en la parroquia pontificia de Santo Tomás de Villanueva de Castel Gandolfo y después, a mediodía, rezará la oración del ángelus en la Plaza de la Libertad frente al Palacio apostólico, como solían hacer sus predecesores. El domingo 20 de julio celebrará misa en la catedral de Albano, cercana a Castel Gandolfo, para regresar de nuevo para dirigir el ángelus en la Plaza de la Libertad. Ya por la tarde, retornará al Vaticano. En agosto, León XIV también se dejará ver de nuevo en Castel Gandolfo el viernes 15 para presidir la eucaristía con motivo de la fiesta de la Asunción de la Virgen María y el domingo 17 para rezar el ángelus. Esa misma tarde volverá al Vaticano.

Al margen de las escapadas papales, durante el mes de julio se suspenderán todas las audiencias privadas, así como las audiencias generales de los miércoles, que volverán a partir del 30 de julio en la plaza de San Pedro.

Según explican desde la Santa Sede, León XIV se desplazará en la tarde del 6 de julio, después de rezar el ángelus en la Plaza de San Pedro, precisamente hasta las villas pontificias, la zona de los jardines donde se encuentra una pequeña residencia, la llamada Villa Barberini. Así pues, el Pontífice estadounidense no residirá en el palacio principal, puesto que Francisco decidió convertirlo en un museo en 2015 y dejó de ser así vivienda para los Sucesores de Pedro desde la época de Urbano VIII. Mientras que Juan Pablo II y Benedicto XVI se desplazaban, al menos una vez al año a Castel Gandolfo, Francisco solo acudió en marzo, julio y agosto de 2013, y nunca más regresó.

Francisco no pasó uno solo de sus veranos en la localidad italiana, entre otras cosas porque Jorge Mario Bergoglio nunca tomó vacaciones como tal, ni como arzobispo de Buenos Aires, pero tampoco como Papa. Es verdad que durante unas semanas de julio anulaba toda su agenda institucional y su actividad pública, pero nunca desconectaba del todo de sus tareas papales. Es más, era un tiempo especialmente productivo para él, en tanto que intensificaba lo que denominaba «el sistema de antenas», esto es, las reuniones informales que mantenía en la residencia de Santa Marta para obtener información por canales no oficiales sobre la realidad social y eclesial. Además, el parón del engranaje vaticano le permitía dar un empujón tanto a las diversas reformas como para perfilar las principales encíclicas y exhortaciones apostólicas que firmó.

¿Orígenes cántabros?

Más allá de estos planes de verano, una investigación del periódico «The New York Times» ubicaría las raíces españolas de León XIV de las que tanto se habló los primeros días de Pontificado en Cantabria. El periódico norteamericano sitúa a cuatro tatarabuelos de undécima generación de Robert Prevost en la localidad Isla, en el municipio de Arnuero, donde eran hidalgos.

Así figura en un censo de 1573 de Isla, que ha identificado a más de 80 de sus antepasados, de los cuales 40 proceden de Francia, 24 de Italia y 21 de España. El Ayuntamiento de Arnuero ya ha encargado un estudio para verificar si en ese pueblo costero nacieron integrantes de la undécima generación del Papa.