Más cerca de la doble inclusión de las personas con autismo

Obra Social La Caixa participa en el programa de ayuda para personas con este trastorno.

Las personas que presentan Trastorno del Espectro Autista (TEA) manifiestan dificultades para comunicarse e interactuar a nivel social, de manera que para ellas puede ser complicado acceder a una vida independiente o laboral. Sin embargo, tienen características que les hacen muy válidas para el trabajo, como su meticulosidad o su curiosidad por temas concretos, su atención a los detalles, o por ejemplo, su gran lógica, su honestidad y cumplimiento de las normas.

En este sentido, la Asociación Autismo Ávila decidió poner en marcha un programa que trabaja de forma paralela la capacitación laboral y la preparación para la vida independiente de personas con TEA, ya que la mayor parte de estos proyectos se centran en el ámbito laboral, y no en el aspecto social. Dicho programa se ha puesto en marcha este mismo año, gracias a la colaboración de Obra Social La Caixa.

Es una iniciativa pionera por su doble programa formativo, ya que, por una parte, este proyecto aborda el aprendizaje de las habilidades laborales. Y por otra, les ayuda durante el proceso de adquisición de las capacidades para llevar una vida independiente. En ambos casos, todo el trabajo que se lleva a cabo se adapta a las competencias concretas de cada una de las personas que participan en este programa.

En lo relativo a la formación laboral, que dura aproximadamente siete semanas, el primer paso es conocer a los candidatos, sus habilidades y competencias. Todo ello se realiza a través de un ejercicio práctico de montaje de robots. En una segunda fase, a través de lo que se conoce como «scrum», se trabaja con el beneficiario sus competencias para organizarse, para trabajar en grupo y gestionar el tiempo.

En un tercer nivel ya se lleva a cabo un trabajo práctico, que consiste en la realización de un proyecto personal, con el objetivo de afianzar los contenidos adquiridos. Este último módulo se realiza a distancia, desde sus hogares, mientras que los dos anteriores y el cuarto módulo, que se concreta en enseñar a los candidatos a elaborar un currículum o a buscar empleo, son presenciales. De esta manera, los beneficiarios procedentes de diversos puntos de España se alojan en las dos casas de las que dispone la asociación en Ávila. Esto permite a la entidad trabajar con los participantes también sus capacitaciones para la vida independiente.

«En la actualidad, el programa está integrado por nueve personas con diagnóstico de TEA y con edades comprendidas entre los 23 y los 37 años. El objetivo de esta iniciativa es que reciban paralelamente a la capacitación laboral, una formación en temas relativos a la higiene, la salud, la apariencia externa, la limpieza y el orden en el hogar, el manejo del dinero o cómo hacer la compra», comenta Elena Guisández, gerente de la citada entidad.

Algo que resulta más fácil, eficaz y práctico si estas personas con TEA viven de forma independiente, lejos de su entorno y acompañados en todo momento por los técnicos de la asociación.