Castilla y León

En 20 años el topillo ha colonizado Castilla y León

En 20 años el topillo ha colonizado Castilla y León
En 20 años el topillo ha colonizado Castilla y Leónlarazon

Un estudio liderado por científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) revela que en veinte años el topillo campesino ha colonizado varios millones de hectáreas de llanuras agrícolas de Castilla y León, hasta estar presente en toda la Comunidad. Según ha informado el CSIC en un comunicado, los resultados del estudio, publicado en Biological Invasions, asocia esta colonización al cambio en los cultivos, con un incremento de los hábitats idóneos para este roedor, como los cultivos de alfalfa y los regadíos.

Se trata de una especie que se reparte en zonas de montaña de la península Ibérica, especialmente en Pirineos y el sistema Central que rodea Castilla y León.

Hasta finales de los años 70 del siglo XX, según el CSIC, la presencia de este roedor en Castilla y León se limitaba a las zonas de montaña, y en "veinte años la especie se ha extendido y ha colonizado varios millones de hectáreas de llanuras agrícolas, causando daños en las cosechas".

Esos cambios en los cultivos propician paisajes "muy favorables para que se asiente el topillo", por lo que "es necesario encontrar métodos de prevención y control de plagas que sean duraderos, económicamente viables y que no sean dañinos para el medio ambiente", según ha sostenido Francois R. Mougeot, investigador del CSIC en la Estación Experimental de Zonas Áridas.

Además, la mayor presencia de este roedor ha provocado, según apuntan los investigadores, daños a la agricultura y ha contribuido a la transmisión de enfermedades en humanos como la tularemia, una enfermedad propia de pequeños roedores y que en el hombre puede provocar fiebre alta, inflamación de los ganglios linfáticos, vómitos o diarrea.

El estudio incide en que además "ha creado conflictos por los métodos empleados para luchar contra estos animales y los perjuicios que ocasionan a otras especies, como ocurrió durante la plaga de topillo campesino de 2007-2008".

El siguiente paso que propone este equipo científico es entender mejor las dinámicas poblacionales de los topillos y saber qué provoca un aumento poblacional en las zonas agrícolas que ya están colonizadas.

Así se conseguiría anticipar próximas plagas, y buscar mejoras en las herramientas de control y prevención, ha concluido Mougeot. Efe