Prisión para los dos imanes de Ibiza por adoctrinar a menores como «futuros muyahidines»

El juez Velasco ha acordado este viernes la prisión provisional y comunicada para los dos imanes de la mezquita de Sant Antonio de Portmany, en Ibiza, Abdelkrim Elmerabet y Jalal Rochki, por los delitos de colaboración con el Estado Islámico.

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco acordó hoy el ingreso en prisión de los dos imanes de la mezquita de Sant Antonio de Portmany, en Ibiza, Abdelkrim Elmerabet y Jalal Rochki, a quienes imputa los delitos de colaboración con el Estado Islámico, en su modalidad de adoctrinamiento, captación, autoadoctrinamiento y posesión de documentación que incita a la incorporación al estado Islámico.

En su auto, el juez relata que los dos detenidos, Elmerabet como líder religioso de la comunidad islámica de Sant Antonio de Portmany y Rochki como su sustituto, ayudante, llevaban a cabo labores de adoctrinamiento y ensalzamiento de las actividades violentas del grupo terrorista internacional Estado Islámico. Lo hacían tanto en «en actos religiosos, en sus prédicas -como, por ejemplo, la realizada en la fiesta del cordero de 2012, donde el primero de ellos realizó peticiones por «los hermanos muyahidines y por los combatientes en Siria»- como en conversaciones con miembros de su comunidad y redes sociales, donde colgaban vídeos del Estado Islámico «que enseñan a matar, exhiben decapitaciones y ejecuciones», y, además, aleccionaban a los niños para «ser futuros muyahidines»

Para valorar la gravedad de los hechos el juez ha tenido en cuenta que los dos detenidos daban clases de religión a cincuenta niños, sobre los que poseen "una ascendencia intelectual en que esas enseñanzas violentas tienen visos de propiciar más actividad terrorista ya consiguiendo que terceros vayan a incorporarse al terrorismo internacional en zonas de conflicto, ya para que lo hagan en Europa".

Unos hechos que revisten la gravedad suficiente como para acordar la prisión, al entender además el magistrado que en este caso concurre riesgo de fuga y reiteración delictiva, teniendo en cuenta la función de los dos detenidos en la mezquita, que les dan "una ascendencia intelectual que posibilitaría que jóvenes se incorporen a la organización terrorista” del Estado Islámico.