El desafío independentista

Puigdemont ve «indispensable» que una Cataluña independiente tenga ejército

Anuncia que dejaría la presidencia seis meses después del 1-O

El presidente de la Generalitat Carles Puigdemont responde a través de Facebook Life las preguntas que los ciudadanos
El presidente de la Generalitat Carles Puigdemont responde a través de Facebook Life las preguntas que los ciudadanoslarazon

Anuncia que dejaría la presidencia seis meses después del 1-O.

La Cataluña independiente suscita más preguntas que respuestas. El problema no acaba aquí, ya que las respuestas no son inequívocas, sino que varían en función de cada uno de los arquitectos de la secesión. Uno destacado, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, dio ayer su opinión acerca de la necesidad de tener o no Ejército propio en Cataluña, y fue contudente: «Es absolutamente indispensable».

Puigdemont se expresó de esta forma en una charla que protagonizó en las redes sociales a través de «Facebook Live». El titular de la Generalitat respondió las preguntas de varios ciudadanos realizadas mediante un chat de la aplicación Zonetacts, que en la mayoría de casos estuvieron centradas en cuestiones relativas a una eventual independencia de Cataluña.

La cuestión militar salió a lo largo de las preguntas y Puigdemont no titubeó. «Estamos en un combate global, lo hemos visto tristemente estos días, con una amenaza muy grave, la amenaza yihadista, que debemos hacer frente colectivamente», afirmó en alusión a los atentados en Cataluña. Y añadió: «Hace falta esfuerzo e inteligencia militar, y recursos para hacer frente a los ataques de las guerras modernas». A su juicio, Cataluña, como «país expuesto, se debe poder defender y sindicar su voluntad de defensa con otros». «No tengamos complejos, Cataluña ha de poder tener una política de defensa moderna, democrática y muy homologable a los esfuerzos que hacen naciones que consideramos aliadas», argumentó.

En otro orden de cosas y preguntada por su continuidad como presidente de la Generalitat, Puigdemont aclaró que en el caso de que el «sí» a la independencia se impusiese en el eventual referéndum, él permanecería en el cargo seis meses más hasta la convocatoria de unas elecciones constituyentes a las que ya no optaría. Según la Ley de Transitoriedad que Junts pel Sí y la CUP presentaron en el Parlament, tras la victoria del «sí» se abriría un proceso constituyente con tres fases sucesivas: una primera, de proceso participativo; una segunda, seis meses después, de elecciones constituyentes y elaboración de una propuesta de Constitución por parte de una Asamblea Constituyente, y una tercera, de ratificación de la constitución mediante un referéndum.

Sobre otras cuestiones, Puigdemont consideró «absolutamente necesario» que el castellano sea lengua cooficial porque «los derechos lingüísticos no pueden retroceder, deben ser escrupulosamente respetados y nos comprometemos a hacerlo».

Interrogado por la moneda que se empleará en la Cataluña independiente, el presidente de la Generalitat aseguró que se seguirá usando el euro «sí o sí, es nuestra moneda y no hay alternativa». También subrayó que «el sistema de pensiones en Cataluña es altamente sólido y viable». Y, finalmente, sobre los pasivos de la Generalitat, dijo que si existe un acuerdo con el Estado, Cataluña «estará perfectamente dispuesta a asumir la parte de la deuda del Reino de España que nos toca». «Que todo el mundo esté tranquilo, Cataluña es una economía solvente que genera recursos», enfatizó.