Construcción

El juez tumba la construcción de 80 chalés en la ampliación de La Moraleja

La sentencia, sobre la que cabe recurso, afirma que la obra va en contra del Plan General

Algunos de los chalets de la primera fase de urbanización (en La Carrascosa A) ya se han empezado a levantar
Algunos de los chalets de la primera fase de urbanización (en La Carrascosa A) ya se han empezado a levantarlarazon

La sentencia, sobre la que cabe recurso, afirma que la obra va en contra del Plan General.

El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número cinco de Madrid ha fallado a favor de la Entidad Urbanística de Conservación de La Moraleja y ha paralizado la construcción de 80 viviendas unifamiliares con garaje, piscina y club social en el ámbito de La Carrascosa, un apéndice al suroeste de la urbanización de lujo. Los chalés iban a edificarse en la calle Camino Ancho número 2, en la parcela A-1, pero el magistrado Ramón Fernández Flórez ha anulado el decreto número 8721 aprobado por el Pleno del Ayuntamiento de Alcobendas por el que concedía la licencia de obra a la sociedad Universal de Negocios e Inversiones S. A. por «ser contrario al Derecho» el Plan Especial de Mejora de la Ordenación Pormenorizada de las parcelas A-1 y A-2 de la zona este de La Moraleja.

En la sentencia, sobre la que cabe recurso, el juez justifica su decisión alegando, entre otras cosas, que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Alcobendas, de 2009, contempla que, en el caso de ampliar el espacio urbano hacia el este de la urbanización de La Moraleja, este ensanche se realizará en forma de uso terciario del terreno. La decisión se basa en los ruidos procedentes del aeropuerto de Barajas, ya que, al contrario que en los domicilios, en las oficinas «los trabajadores no pernoctan y las molestias por ruidos no afectan a su salud e integridad física».

Por su parte, el Consistorio de Alcobendas, una de las partes demandadas por la entidad vecinal junto con la empresa responsable de la construcción de las viviendas, alegó que la decisión de sustituir el plan de construir oficinas por viviendas «mejoraría la calidad de vida de todos los vecinos de la zona, puesto que habría menos problemas de movilidad y aparcamiento», una interpretación que el magistrado calificó en el fallo judicial como «reduccionista» y «parcial»: «Ello no supone una mejora del medio urbano, sino más bien parece motivada por razón de beneficio económico».

El PGOU de 2009 contempla que en el suelo urbano consolidado de la localidad se puedan construir por necesidad 1.325 viviendas nuevas, «ignorándose la razón por la que, tan solo en el ámbito de La Carrascosa se prevé la construcción de 1.050». Este es un suelo en el que no estaba previsto levantar domicilios, por lo que el plan posibilitaría que se pudieran alzar hasta un 177 por ciento más de viviendas nuevas de las que se contemplaban en el Plan General de Ordenación Urbanística.

La lucha de los vecinos de La Moraleja contra la decisión de urbanizar la zona colea desde hace meses. En octubre, un grupo de residentes advirtió en una conversación con LA RAZÓN que la construcción de más de mil viviendas en los próximos años y el correspondiente aumento de residentes y vehículos provocaría un «colapso total» en la urbanización. Según los habitantes, el elevado número de coches que transitaría por unas infraestructuras «ya insuficientes» taponaría las arterias circulatorias. Los bloques de este apéndice no contarían con conexión directa con las carreteras colindantes, y los vecinos tendrían que atravesar toda la urbanización para poder llegar hasta sus hogares.

La Comunidad denuncia a la Carrascosa B

La Comunidad de Madrid llevará a los juzgados el Plan Especial aprobado el pasado mes de octubre por el Ayuntamiento de Alcobendas en el que el Ejecutivo dio luz verde a la urbanización de los terrenos de La Carrascosa B. Las razones del Ejecutivo regional para impugnar el texto, que adelantó al medio local «Gente en Alcobendas», son que el Consistorio empleó un «planeamiento inadecuado» y que invadió las competencias autonómicas: «El instrumento apropiado sería la modificación del Plan General de Ordenación Urbana».