¡Olé tú!: 10.000 veces gracias a “tothom”

Este sábado tuve la ocasión de vivir uno de esos días que, por muchos años que pasen, siempre recordaré. Desde el momento en el que me bajé del avión y pude comprobar que en la zona de llegadas del aeropuerto de El Prat había unas 20 personas esperándome con camisetas del Sevilla Fútbol Club y del equipo campeón de Liga, tuve muy claro que sería una jornada inolvidable y las previsiones superaron todo lo que se me había pasado por la cabeza desde que decidí poner en marcha esta peregrinación.

Pellizco gordo

Ya en el hotel donde teníamos previsto comenzar la peregrinación, me encontré con más de 200 personas en la puerta. Aquí ya me pegó un pellizco gordo la barriga. Algo grande estaba a punto de suceder. Y así fue. A las 19:30, la calle «Travessera de les Corts» estaba cortada al tráfico y en la puerta del NH Stadium no se cabía. 10.000 personas, 10.000 gargantas, 10.000 camisetas y bufandas, 10.000 enfermos del «shiquetito», 10.000 almas dispuestas a llevar en peregrinación la «Biblia» al Templo de Su Santidad Leo Messi. Nada ni nadie podía hacer que aquello se torciera. Ni siquiera un buen Levante necesitado de puntos. Era el día que Leo había escogido para levantar su décimo título de Liga. Su Santidad quería levantarlo ya, en su casa, en su Templo. Bajo la atenta mirada de Thiago, Ciro y Mateo y los 90.000 culés allí presentes.

Objetivo Liverpool

Una vez acabado el partido y la celebración del nuevo título de Liga, yo tuve la fortuna de estar cerca de los jugadores, de los campeones. Y debo confesaros que en la cabeza de todos, absolutamente de todos, estaba ya el inminente partido de Champions contra el Liverpool del próximo miércoles en el Camp Nou, la ida de las semifinales europeas. Por eso, si alguien notó una o dos marchas menos en el festejo de celebración... que haga como el Rey y piense en los Klopp, en los Salah, en lo Firminos y compañía. Y ya sabéis que este año Leo también ha apuntado a la Champions.