Sucesos

La Policía deja a los traficantes del Estrecho sin narcosubmarinos

Desmantelada una organización que suministraba drones semisumergibles a redes de narcotráfico de varios países. Es la primera vez que se intervienen este tipo de vehículos acuáticos sin tripulación a bordo

El kraken, una especie de monstruo colosal y legendario que las crónicas nórdicas de la Edad Media describían como un engullebarcos y que mucho después popularizó la saga cinematográfica de Piratas del Caribe, ha sido el curioso nombre elegido por la Policía Nacional para referirse a su última gran operación contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar, una de las principales puertas de entrada en Europa para la droga procedente de África. La Operación Kraken, según informaron ayer las autoridades en Algeciras (Cádiz), ha permitido desmantelar una organización que suministraba drones aéreos y semisumergibles a redes de narcotráfico de distintos países. Hay ocho detenidos en Cádiz, Málaga y Barcelona, entre ellos un piloto de helicópteros con conocimientos tecnológicos para desarrollar estos sofisticados vehículos no tripulados.

Las investigaciones empezaron en abril de 2021 cuando la Policía francesa alertó a la española de que en Castellar de la Frontera (Cádiz) había una potente organización que había suministrado vehículos con «caletas» (huecos en los coches para esconder alijos) y sofisticados artilugios a redes galas para transportar droga. Los agentes comprobaron cómo los sospechosos recibían multitud de visitas de organizaciones criminales de Cataluña, la Costa del Sol, el Campo de Gibraltar, Ceuta, Italia, Francia o Dinamarca.

En los ocho registros realizados, además de hachís y marihuana, han sido intervenidos seis drones de gran tamaño con hasta 12 motores y autonomía para 30 kilómetros, suficientes para cruzar el Estrecho de Gibraltar. Podrían valer más de 50.000 euros. También han sido intervenidos tres semisumergibles no tripulados, uno terminado y dos en construcción, que iba a ser entregados a una organización francesa de transporte de cocaína. Estos «drones submarinos» son una especie de tabla de surf que viaja por la superficie de agua, con un depósito en su parte inferior con capacidad para transportar entre 150 y 200 kilos. Ambos aparatos, con dispositivos GPS, podían ser operados desde cualquier lugar a través de tablets con las que se controla la salida, la ruta y la llegada al punto donde se recogía el cargamento.

En la foto, (Izq a dcha)El comisario de Algeciras (Cádiz), Francisco López Matesanz; el jefe superior de Andalucía Occidental, Andrés Garrido, y el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, observan uno de los submarinos incahutados por la Policía Nacional. EFE/A.Carrasco Ragel
En la foto, (Izq a dcha)El comisario de Algeciras (Cádiz), Francisco López Matesanz; el jefe superior de Andalucía Occidental, Andrés Garrido, y el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, observan uno de los submarinos incahutados por la Policía Nacional. EFE/A.Carrasco RagelA.Carrasco RagelAgencia EFE

Los investigadores también detectaron trece vehículos de distinto tipo a los que se les practicaban de forma artesanal dobles fondos, algunos de ellos dentro de remolques y capaces de albergar hasta 800 kilos de droga. En concreto uno de estos transportes fue interceptado cuando se dirigía hacia Dinamarca a bordo de una grúa con la intención de evitar posibles controles policiales, con 218 tabletas de hachís en el interior de una “caleta”.

Dado el carácter internacional de los contactos que mantenía la red se estableció una estrecha colaboración con la Policía Nacional francesa, ya que un importante número de estos vehículos con dobles fondos se dirigían, una vez cargados con droga, hacia el país vecino.

En las pesquisas se ha identificado también a varios ciudadanos marroquíes y daneses que estarían enviando desde el sur de España importantes cantidades de hachís hacía el norte de Europa destinadas a las organizaciones criminales de origen magrebí conocidas como “Mocro-maffia”.

La operación concluyó con la detención de ocho personas en Ceuta (1), Málaga (2) y Cádiz (5) acusadas de los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.

En una rueda de prensa celebrada en Algeciras, el jefe superior de Policía Nacional de Andalucía Occidental, Andrés Garrido, destacó que la operación muestra como los narcos van sofisticando sus medios “con un nivel tecnológico altísimo”, buscando alternativas para tratar de “burlar” a la Policía.

Los agentes subrayaron también el peligro que podrían suponer el vuelo de estos drones que pueden volar con hasta dos kilómetros de altura, sin comunicar a las autoridades sus rutas. ”Un impacto de un ave de 4 o 5 kilos puede ser ya peligroso para una aeronave, estos drones pueden pesar 20 o 30 kilos”, indicaba un agente.

Los agentes creen que la red llevaba dos años trabajando en el diseño de estos drones y que han sido interceptados antes de que estuvieran operativos. Su tecnología tendría que ser capaz de burlar los sistemas antidrones de la Policía, capaces de detectar vuelos de estos vehículos no tripulados y de neutralizarlos. Cuentan con sistemas portátil y con antenas en La Línea de La Concepción, Ceuta, Cádiz y Marbella.