«Es muy difícil evitar por completo el glutamato»

Lo ideal es que consumamos alimentos frescos sin potenciadores que, en dosis altas, puedan resultar perjudiciales

-¿Debemos evitar el glutamato?

-Evitarlo completamente es muy complicado, porque el ácido glutámico y sus sales se encuentran en muchos alimentos de manera natural y no son perjudiciales para la mayoría de las personas, pero lo ideal es intentar evitarlo a dosis altas como aditivo alimentario. Muchas personas son sensibles a este aditivo y experimentan síntomas al tomarlo como dolor de cabeza, migraña, nauseas, etc. y deben evitar alimentos que lo contengan. Lo ideal es que consumamos alimentos frescos sin potenciadores que, en dosis altas, puedan resultar perjudiciales.

-¿Existe el síndrome del restaurante chino?

-Se ha asociado con mareos, náuseas, sudoración, debilitamiento, taquicardia y dolor de pecho. Ocurre sólo en personas que son sensibles a este aditivo alimentario.

-¿Puede producir obesidad?

-El glutamato es un aminoácido que interfiere en numerosas funciones neuroendocrinas, entre ellas la regulación del apetito y la saciedad.

-Entonces ¿por qué se sigue utilizando?

-Porque la FDA lo considera seguro y eso es determinante, aunque está en el foco de mira y se sigue investigando. Ayuda a mejorar el sabor de los alimentos y eso es lo que le importa a la industria.

-Parece que está en todas partes. ¿Cómo se puede evitar?

-Evitarlo al 100% no se puede porque se encuentra en los propios alimentos, por ejemplo en la carne. Pero lo que más nos ayudará es la premisa de evitar alimentos procesados que no sean frescos.

-Los «defensores» del glutamato dicen que contiene menos sodio que la sal...

-Qué fácil es dar lugar a confusión en materia de alimentación. El glutamato potencia el sabor, pero enmascara otros. Y tiene menos sodio que la sal de mesa, pero tiene sodio igualmente. Por lo que no es un argumento suficiente para recomendarlo como una sustancia que nos beneficie de algún modo.