Alimentación

Cómo no arruinar un desayuno saludable

Hemos hablado numerosas veces de la importancia que tiene la primera comida del día. De que hay que desayunar, y desayunar bien, para que tanto nuestro estado físico como mental nos acompañen en todo lo que tenemos por delante: trabajo, compromisos, familia, responsabilidades, etc. Pero no todo vale. No todos los desayunos son nutritivos y saludables, de hecho, algunas de las opciones nos podrían hasta arruinar el día, ¡y la dieta! Estos son los alimentos que deberías evitar ingerir cada mañana en la comida más importante del día.

Cómo no arruinar un desayuno saludable
Cómo no arruinar un desayuno saludablelarazon

Hemos hablado numerosas veces de la importancia que tiene la primera comida del día. De que hay que desayunar, y desayunar bien, para que tanto nuestro estado físico como mental nos acompañen en todo lo que tenemos por delante: trabajo, compromisos, familia, responsabilidades, etc. Pero no todo vale. No todos los desayunos son nutritivos y saludables, de hecho, algunas de las opciones nos podrían hasta arruinar el día, ¡y la dieta! Estos son los alimentos que deberías evitar ingerir cada mañana en la comida más importante del día.

Elige cereales integrales sin azúcar, si verdaderamente sientes que necesitas endulzarlos un poco, puedes añadir una cucharada (de las pequeñas) de Stevia e incluso de azúcar. Los cereales que vienen ya endulzados aportan un extra de azúcar completamente innecesario para nuestro organismo. Sobre los dulces, en lugar de un pastel, lo ideal es optar por una rebanada de pan de grano entero y luego rematarlo bien con una mermelada de fruta 100% o con un embutido como pavo o jamón. En resumen, los cereales azucarados, las tortitas o los pasteles son ricos en almidón y azúcar y bajos en proteínas. La proteína mantiene la sensación de saciedad por más tiempo, así que gracias al aporte extra de proteína en el desayuno, no sentiremos tanta hambre en mitad de la mañana.

También resulta muy interesante añadir fruta en el desayuno. Las frutas y verduras son generalmente bajas en calorías y muy ricas en nutrientes. Los expertos recomiendan que comamos cinco porciones de frutas y verduras todos los días, de ahí que se deba empezar a consumirlas desde el desayuno. Si necesitas arrancar el día con un desayuno más potente, una buena idea sería hacer una tortilla de setas, pimientos y cebollas y servirla con una rodaja de pan integral (se puede untar tomate por encima o incluso cortarlo a rodajas). Puedes acompañarla por un bol de frutas, tipo macedonia, a modo de postre. Esta sería una fórmula perfecta de desayuno porque combina todos los nutrientes.

Por último, y una vez más, si crees que saltarse el desayuno es una buena manera de reducir las calorías, estás muy equivocado. Las personas que no desayunan son más propensas a tener sobrepeso, probablemente porque comen demasiado tarde algo que ya deberían haber consumido (y quemado).

Buenos días y felices desayunos.