La hidratación, el primer paso para lucir unos pies bonitos

Suben las temperaturas y se acerca el momento de calzarse unas sandalias y, por lo tanto, mostrar los pies.

Hay cosas que se repiten de forma cíclica, y la cara de circunstancias que se nos queda el primer día del año que nos calzamos unas sandalias es una de ellas. Talones resquebrajados, uñas de color amarillento o blanquecino, durezas.... Son efectos antiestéticos que podemos evitar siguiendo los consejos de los expertos.

El tiempo suele inmiscuirse entre nosotros y los buenos propósitos, así que, si se trata de adquirir una nueva costumbre en relación a los pies, ¿cuál debería ser? "Si solo tenemos tiempo para un único cuidado, hay que hidratar muy bien los pies", explica Cristina Coma, directora del centro estético Amarama, en Barcelona.

Top 5 de tratamientos

Para Coma, las cinco costumbres básicas para tener unos pies bonitos son:

1. Exfoliar los pies dos veces a la semana: es la mejor manera de alisar la piel y eliminar asperezas.

2. Hidratarlos cada día: así se previenen las grietas que aparecen en los talones y el color de la piel se uniformiza.

3. Nutrir la cutícula a diario: haciéndolo, se mejora el aspecto de las uñas.

4. Elegir un tratamiento específico de pedicura en un centro de confianza cada tres o cuatro semanas.

5. Utilizar, siempre que sea posible, calzado cómodo.

Nuevos acabados

"Los últimos avances en esmaltes han permitido poder lucir unos pies bonitos durante más tiempo, con un acabado que lo resiste todo y no se estropea", explica Coma, que aplica en su centro un tratamiento que se aplica como un esmalte y que se mantiene, como un gel, durante dos semanas. "Cuando alguien ve lo bonitos que puede llevar los pies, no hay marcha atrás... va a empezar a darles para siempre el cuidado que se merecen".

Los hábitos

Siete de cada diez españoles no utilizan una crema específica para hidratarse los pies, según un estudio sobre hábitos de salud e higiene que el Instituto de Investigación Nielsen hizo público el año pasado. Esto puede ser un problema porque muchas de las cremas que no están específicamente pensadas para los pies no ofrecen un cuidado suficiente. De este estudio también se desprendía que ocho de cada diez podólogos españoles consideran que los hábitos de cuidado de los pies de los españoles no son, en general, suficientes.