Oncología 2.0 para supervisar la eficiencia terapéutica

El Instituto Catalán de Oncología (ICO), de la mano de su socio tecnológico Telefónica, ha puesto en marcha el «e-tICO». Un proyecto e-heatlh que pretende el control preciso desde el domicilio de los pacientes con cáncer en tratamiento

Los tratamientos oncológicos actuales gozan de muy buenas tasas de eficacia y seguridad, pero aún se pueden perfeccionar si se profundiza más en cómo repercuten en la calidad de vida de los pacientes. El proyecto «e-tICO» tiene como meta este objetivo: mejorar la calidad de vida de pacientes con neoplasias localizadas. Su desarrollo se llevará a cabo en el Instituto Catalán de Oncología de la mano de su socio tecnológico Teléfónica, que pone a su servicio la plataforma de Gestión Remota de Pacientes.

Fernando Hernández Segado, como parte del equipo de Desarrollo de Negocio de e-Health de Telefónica, explica que «prestamos servicio al ICO con nuestra plataforma de gestión remota de pacientes, una plataforma extremo a extremo en la que ofrecemos el equipamiento tecnológico, los dispositivos biomédicos asociados al paciente en función de su patología, las comunicaciones securizadas, la formación, la instalación y el mantenimiento en el domicilio del pacientes, así como la integración con la historia clínica electrónica y la consultoría para el diseño del proceso asistencial y la gestión del cambio en dicho proceso. De esta manera el equipo asistencial se dedica básicamente a la atención de los pacientes, mientras Telefónica gestiona de manera integral el resto de las áreas de trabajo».

Cómo funciona

Desde el ICO, Ricard Mesía, oncólogo médico del ICO L’Hospitalet, es uno de los impulsores del proyecto. Su equipo será el supervisor del proyecto inicial piloto que se llevará a cabo con un grupo de 25 enfermos de cáncer de cabeza y cuello del ICO Hospitalet. Los pacientes dispondrán en su casa de unos equipos de presión arterial, temperatura corporal y de frecuencia cardíaca conectados a una tableta que enviará los datos al ICO. Durante el tratamiento de quimioterapia y/o radioterapia, este sistema permite la monitorización de la toxicidad terapéutica, lo que ayudará al paciente, y al médico, a adecuar las visitas presenciales a la consulta. Este método discrimina las visitas innecesarias si el curso del tratamiento es el adecuado.

El servicio no sólo se limitará a los cinco o seis meses en los que se cursa normalmente un tratamiento, sino a los meses siguientes. Esto se debe a que las fases posteriores a este tipo de tratamientos, normalmente unos dos o tres meses, son delicadas y requieren de un control de determinados parámetros biomédicos para poder diagnosticar de manera precoz y proactiva, comorbilidades que pudieran surgir. De este modo, además de evitar desplazamientos de los pacientes al centro sanitario, se consigue controlar mejor el estado de salud del enfermo y disminuir el riesgo de sufrir descompensaciones y efectos secundarios y, por tanto, actuaciones de los servicios de urgencias.

Hernández Segado apunta que «el principal desafío que encontramos en los pacientes oncológicos es que son pacientes tremendamente frágiles y que en muchos casos tienen que hacer frente a los efectos secundarios de los tratamientos de quimioterapia. Ahí es donde entra nuestro servicio, para poder seguir de cerca, como si estuvieran en la propia consulta, estos efectos adversos, de manera que el especialista pueda tomar las medidas adecuadas para minimizar las descompesaciones y determinar, si es necesario, el momento en el que el paciente tiene que ingresar en el centro hospitalario».

Futuro

Una vez se obtengan los resultados del proyecto inicial, el equipo de Mesía valorará su expansión a diferentes servicios y patologías de los centros ICO. Por su parte, la persona de Desarrollo de Negocio de Telefónica añade que «estamos comenzando por el área de cáncer de cabeza y cuello; la idea es que, una vez comprobada la idoneidad de esta monitorización, se extienda al resto de servicios del ICO (tanto en Barcelona como en Badalona y Girona). Del mismo modo estamos contactando con otros centros oncológicos de referencia a nivel nacional para extender este servicio y que pueda beneficiar a muchos más pacientes que sufren las consecuencias del cáncer, tratando de mejorar todo lo que se pueda su calidad de vida».

Dada la versatilidad de la plataforma de Seguimiento Remoto de Pacientes de Telefónica, en un futuro inmediato se podrá extender esta experiencia a otros pacientes con otros tipos de cáncer, atendidos tanto desde esta prestigiosa institución catalana con reconocimiento internacional, como desde otras instituciones sanitarias a nivel mundial.

Herramientas terapéuticas 2.0

Además de recibir los últimos tratamientos más adecuados a cada tipo de cáncer, los enfermos incluidos en «e-tICO» tendrán otras armas para conocer la eficacia de su terapia. «Al paciente se le entrega un dispositivo móvil (tableta) donde acceder a la plataforma de gestión remota de pacientes, cuestionarios de salud, adherencia farmacológica, videoconsultas, contenidos educativos, y toma de fotografías. Por otro lado, el sistema lleva asociados para estos pacientes oncológicos otros dispositivos como son la báscula para controlar oscilaciones de peso, termómetro digital para monitorizar cambios en la temperatura y tensiómetro para la presión arterial y el pulso», explica Hernández Segado. De esta forma, los profesionales asistenciales del ICO podrán mejorar y agilizar significativamente su disponibilidad y respuesta a las necesidades de sus pacientes.