PSOE: hoy comienza todo. La purga del tío Pedro

“Hoy comienza todo. Vamos a construir el nuevo PSOE". Es el mensaje que un eufórico Pedro Sánchez lanzó ayer a sus seguidores insistentemente una vez conocida la previsible victoria. Y sí, hoy comienza. La purga. Y el purgo. Los identificados con el susanismo están muertos (políticamente hablando, entiéndase bien), porque Sánchez quiere construir un PSOE sobre su hiperliderazgo, como ya intentó en el bienio anterior. De hecho, Sánchez puso 200 gestoras. Los susanistas tienen que ser purgados. Y purgadas. Sánchez quiere mandar. Que la cúpula mande. El resto, esclavos a poner ladrillos de su pirámide. Como sucede en Podemos, donde todo está sometido al amado líder.

Después del golpe de octubre de 2016 y las primarias (invento para destruir partidos en Europa), el rencor y los ajustes de cuentas han prendido en el socialismo y va a ser la prioridad absoluta de los vencedores. Todos aquellos que fueron tildados de ‘traidores’ cuando se produjo la defenestración de Sánchez irán cayendo cual diez negritos de Agatha Christie. No puede ser de otra manera.

Enhorabuena @sanchezcastejon Deseo lo mejor para el @PSOE

Los que no se vayan por su cuenta, serán marginados o acosados hasta que se vayan, independientemente de que ganen elecciones.

La presión sobre los susanistas como García Page, Antonio Miguel Carmona, Fernández Vara o la propia Susana Díaz va a ser antológica. El acoso en redes va a hacer las delicias del periodismo. La última esperanza del PSOE de antes (léase Felipe, ZP, Rubalcaba...) de ganar el próximo Congreso e imponer su proyecto político es, con todos los respetos, una ilusión que pinchará como la victoria de la andaluza.

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Carmona, en el momento en el que le hablan las voces dentro de la cabeza. pic.twitter.com/2mw2Wjo96U

#SusanaSanaAE Note preocupes mujer, ya te hacemos sitio en el torneo de petanca. pic.twitter.com/cmAyvrqOIW

@arribaM80 #SusanaSanaAE No te preocupes, ahora ya puedes dedicarte a lo que realmente te gusta. pic.twitter.com/hGk8NCxE9C

Las bases del PSOE están con Sánchez. Se veía venir. Pedro ha sabido construir un discurso tan victimista como agresivo contra el establishment, reforzando además el odio a la derecha. Prefieren a ERC, Podemos o Bildu antes que al PP o a Cs. Y esa es la realidad del PSOE (que Ciudadanos no ha sabido capitalizar porque no se enteran de nada).

El PSOE ha perdido una oportunidad histórica de modernización, moderación y responsabilidad. En lugar de Macron, aquí hay Melénchon.