¿Indefenso?

El Gobierno de Carmena parece que no tiene como prioridad la correcta gestión de multas de tráfico. Sin embargo, este asunto debe ser considerado como un problema urgente e importante. Quiero señalar que mi intención no es alimentar la creencia de que todas las sanciones son recaudatorias. Esta cuestión es muy seria ya que influye en la seguridad vial de los madrileños y debe tratarse con responsabilidad.

Desde mi posición política, estoy obligado a denunciar que el actual sistema de multas de tráfico funciona incorrectamente. Éste tiene fallos importantes que generan situaciones de indefensión a los madrileños y a los miles de ciudadanos que nos visitan. El Gobierno, llamado asimismo “de la gente”, no considera una prioridad política solucionar este perjuicio.

Es importante señalar que el ayuntamiento de Carmena tarda cerca de dos meses en notificar una multa. Un ciudadano puede repetir una misma infracción durante varias semanas hasta que recibe la notificación de la primera denuncia. La puesta en marcha del radar en el Paseo de la Castellana número 300, frente al Hospital de La Paz, ha sido el último ejemplo de multar varias veces por una misma infracción.

Otro de los grandes problemas es la señalización. El ejemplo más conocido son las denuncias por acceso no autorizado a las áreas de prioridad de residentes que existen en el distrito Centro (Ópera, Letras, Embajadores y Cortes). Una de cada cinco denuncias de tráfico se debe al acceso no permitido a estas zonas. Hablamos de más de 500.000 multas al año. He denunciado en varias ocasiones la deficiente señalización de acceso a estas zonas, origen del problema, pero este ayuntamiento hace oídos sordos.

Las multas relacionadas con el Servicio de Estacionamiento Regulado «SER» son el tercer problema. Recientemente, la justicia ha anulado una multa porque la denuncia carecía de suficiente carga probatoria. Entre otras cuestiones, la sentencia requería la existencia de fotografía. Este fallo judicial no significa que, con carácter general, todas las multas del SER vayan a anularse si son recurridas pero debería motivar que cuanto antes, se adjunte fotografía a estas denuncias.

Ahora Madrid, la marca blanca de Podemos en la capital, ha perdido 2 años anunciando cambios y mejoras que los madrileños no ven ni disfrutan. La buena gestión de las multas de tráfico parece un asunto menor para Carmena ya que el número de multas sigue aumentando en Madrid. Este Ayuntamiento debe actuar frente a la inseguridad jurídica porque los ciudadanos no pueden seguir percibiendo a su ayuntamiento como una “caja registradora”.