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La sextaferia era el sexto día de la semana que tradicionalmente dedicaba la gente del campo en Asturias al arreglo de los caminos vecinales. En el reglamento de sextaferias de la Diputación Provincial de Asturias de 1839 se habla de costumbre inmemorial. En algunos pueblos también se llamaba “jornal gracioso” y si algún vecino no acudía, se le permitía pagar un jornal o enviar un jornalero.

Como nos relata magistralmente Ramón Solís en “El Cádiz de las Cortes”, imprescindible libro de lectura para cualquier parlamentario, la labor de los diputados de nuestras primeras Cortes constituyentes incluía, en sentido figurado, a modo de sextaferia, la costumbre de escribir en los innumerables periódicos que florecieron en aquella etapa fundacional de nuestro moderno sistema parlamentario. Sigo creyendo que aquella extendida costumbre de usar la pluma en los periódicos, además de la palabra en la tribuna, debería de ser una obligación que permitiera a los ciudadanos conocer y juzgar nuestra labor, en vivo y en directo, sobre todo cuando un medio nacional como LA RAZÓN nos abre tan generosamente sus páginas para hacer posible un deber tan honroso, con nuestra propia firma.

España vive momentos tan apasionantes como preocupantes, y nadie debería de caer, por desaliento, en la tentación de “pasar”. Los asturianos que nos rebelamos en 2011 contra la imparable decadencia a la que estaba condenando a nuestro país la entente cordial de los dos grandes partidos del sistema, y fundamos FORO, lo hicimos a favor del esfuerzo -nuestro logo es un hormiguero-, contra el pasotismo; a favor de las sumas -“Más Asturias, mejor España” es nuestro lema- contra las restas disolventes; a favor de la exigencia de que ninguna Comunidad Autónoma sea menos que nadie, en contra de que alguna sea más que las demás; a favor de que la solidaridad constitucional incluya a todas las Comunidades Autónomas por igual, en contra de que los recortes a la carta recaigan sobre las más leales, como Asturias, y cumplidoras con las obligaciones de la estabilidad, también constitucional.

Orgullosos de la historia de Asturias, cuna y piedra angular de España, en FORO tenemos las ideas muy claras de nuestro compromiso con los asturianos a los que representamos, cuyos intereses generales defendemos, compromiso tanto más firme cuanto más sólidas sean las bases de una política nacional a la que queremos contribuir, que engrandezca a España, la casa común de todos, dentro y fuera de nuestras fronteras.

Y aquí me tienen, sextaferiando con el teclado del ordenador, como sabemos hacer los asturianos de pueblo, y arrimando el hombro, como un español más orgulloso de su país. Prometo acudir puntualmente cada sexto día.