La recesión continuará en Castilla y León en el segundo trimestre de 2021

La economía de Castilla y León continuará en recesión en el segundo trimestre de 2021, como ha adelantado el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, al explicar que el Producto Interior Bruto (PIB) ha caído en el tercer trimestre del presente ejercicio en un 5,5 por ciento, alertando que el final de este año va a ser peor, debido a las restricciones para frenar la segunda ola de la pandemia.

Un retroceso que se ha debido especialmente a la caída en la construcción y los servicios, con un 8 y un 6 por ciento respectivamente, apoyado por la falta de consumo, que se ha desplomado en un 4,3 por ciento y la inversión. Sólo el sector del campo, con un aumento del 9 por ciento, junto al energético y el exterior han tenido brotes verdes en este tiempo.

Eso hará que Castilla y León cierre este 2020 con una caída «desconocida» del 10,1 por ciento, aunque Fernández Carriedo se ha mostrado optimista al asegurar que el próximo año se crecerá un 7,5 por ciento, y se podrá recuperar tres cuartas partes de lo perdido en este.

El consejero ha explicado que se consolida la fase de recesión aunque disminuye el ritmo de intensidad, aunque se han perdido alrededor de 40.000 empleos equivalentes a tiempo completo.

Por otra parte, el consejero ha exigido al Gobierno una “negociación multilateral” del modelo de financiación autonómica y ha cargado contra el “eufemismo” de la armonización para subir impuestos en las autonomías y ha denunciado las artimañas del Ejecutivo central que negocia con sus “socios” cosas que afectan a las comunidades sin hablar con las autonomías”.

“No nos parece el cauce adecuado, estamos por reducir impuestos, favorecer el crecimiento y apoyar a las familias; estos son los elementos diferenciales de las cuentas de Castilla y León respecto a las del Estado”, ha dicho.