Turismo

Javier Ortega: «La cultura es una herramienta que crea conciencia de lo que somos, por eso hay que mimarla»

El consejero de Cultura y Turismo de Castilla y León afirma que Las Edades del Hombre conlleva un «diálogo y una imagen de concordia» en todo el territorio de la Comunidad

El consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega
El consejero de Cultura y Turismo, Javier OrtegaViajar y mucho más

Este domingo 19 de diciembre, se clausura la 25 edición de Las Edades del Hombre, un proyecto expositivo que identifica a Castilla y León y que revivirá a finales de enero de 2022 en las sedes de Carrión de los Condes (Palencia) y Sahagún (León). La sede de la catedral de Burgos, en cambio, da por finalizada la muestra de manera definitiva este domingo. El consejero de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, Javier Ortega, ha recorrido en estos meses en numerosas ocasiones los espacios expositivos. Antes, lógicamente, ha trabajado en conjunto con la Fundación de Las Edades para hacer de esta edición un ejemplo de gestión y éxito en tiempos difíciles por el escenario de pandemia. En una entrevista de viajarymuchomas.com desgrana la filosofía de un proyecto cultural que aún tiene mucho que decir y bien de Castilla y León.

  • ¿Qué se pretendía con esta edición?

Durante este año, desde la Consejería de Cultura y Turismo, hemos tratado de unificar dos grandes acontecimientos: el VIII centenario de la Catedral de Burgos y el Jacobeo 20-21, que como todo sabemos se ha prologado felizmente al año 2022. Hoy, 19 de diciembre, se cierra la 25 edición, LUX, una exposición que se ha celebrado en cinco sedes y que ha atraído a unos 200.000 visitantes, a pesar de las restricciones obligadas por el escenario de pandemia. Sin embargo, hemos tomado la decisión, por petición también de los ayuntamientos y de otras entidades, de reabrir a partir del 27 de enero las sedes de Carrión de los Condes, en Palencia, y de Sahagún, en León, precisamente también por la continuidad del año Jacobeo.

  • ¿Qué es lo que le ha animado a tomar esa decisión?

Lo primero que hay que decir es que todo lo hacemos, sin duda, con una visión de Comunidad, porque entendemos que de alguna forma la política, la acción de Gobierno de la Junta de Castilla y León, tiene que ser con una visión de Comunidad y de territorio. Eso es lo que nos mueve en todas las actuaciones que emprendemos. Lo que hemos hecho es vincular esos dos grandes acontecimientos, elaborando un programa de exposición conjunto. Por supuesto, de la mano de la Fundación de Las Edades del Hombre, que de alguna manera fuera un recorrido desde Burgos como parte también del Camino de Santiago. Burgos, Carrión de los Condes y Sahagún son puntos del Camino de Santiago.

  • ¿Configurar un itinerario cultural de esta magnitud junto a otras administraciones ha sido complejo?

Tengo que decir que todo lo contrario. Es un proyecto que de alguna manera conlleva un diálogo, una acción coordinada entre administraciones que, además, no son de un mismo color político. Por tanto, pensamos que también en este caso la cultura puede articular la Comunidad y puede mostrar también una imagen de concordia y una imagen nítida de que todos al final trabajamos para los ciudadanos, que es lo que queremos y hacemos.

  • ¿Con 25 ediciones a las espaldas, el proyecto de Las Edades tiene aún recorrido?

Nosotros, como nuevo equipo directivo de la Consejería, lo que queríamos era dar un impulso a Las Edades del Hombre, porque es una marca consolidada, una marca que habla mucho y bien de Castilla y León, del patrimonio que atesora esta Comunidad, que es uno de los más ricos de España, de toda la proyección que queremos dar, sin olvidar que pretendemos trasladar a todos los que nos visitan qué somos y qué queremos llegar a ser. Y el patrimonio es un vehículo para ello. Un patrimonio que en su mayor parte, un 80% es religioso, y que en el caso que nos ocupa, en Las Edades del Hombre, es un patrimonio que atesoran las distintas diócesis.

Ahondando en su pregunta, hemos optado por una exposición con carácter bienal, por eso queremos hacer en 2023 una exposición internacional. En suma, sacar de nuestras fronteras, no sólo de nuestra Comunidad sino de España, y estamos ya trabajando en un proyecto transfronterizo, es decir, con una doble sede: España y Portugal. Pensamos, en definitiva, que Las Edades del Hombre tienen un largo recorrido.

Pensamos que este proyecto expositivo es imagen de la Comunidad, de los ciudadanos de Castilla y León, que incluye a todos los que nos han precedido y es un legado que tenemos que cuidar, difundir y legar a las generaciones futuras en mejores condiciones de la que nosotros lo hemos recibido. Todo eso es lo que configura la estrategia que tenemos sobre la mesa.

  • ¿La diversificación de sedes será por tanto un formato a seguir?

Creemos que es algo muy positivo, en la medida en que también entendemos que la cultura es realmente una herramienta que ayuda a crear conciencia de los que somos. La política cultural de cualquier gobierno tiene que apostar por sumar, por crear y fomentar esa conciencia. La edición que ahora se cierra es un ejemplo claro de ello, que nos ayuda a vehicular nuestro territorio, haciendo partícipes a diferentes zonas de una misma acción de Gobierno. Queremos que los ciudadanos comprueben que las personas que están al frente de responsabilidades políticas trabajan para que esas acciones reviertan en beneficio de la gente. Ellos, los ciudadanos,tienen que ver que somos útiles y miramos por los intereses generales de todos, independientemente de colores políticos o de ideologías.

  • ¿Considera entonces que Las Edades son un proyecto de territorio más allá de la manifestación cultural?

Creo sinceramente que con Las Edades del Hombre conseguimos ese espíritu de concordia. Además, los ciudadanos pueden visibilizar que los políticos no sólo están a veces para echarse los trastos a la cabeza, sino que están pensando realmente en el interés de la sociedad. Pienso que la historia y la cultura une más que separa. Todos podemos sumar para beneficiar, en última instancia, a los ciudadanos que habitan nuestro territorio, que no olvidemos es un medio eminentemente rural, con todos los problemas que conlleva, y por eso creo también que podemos sentirnos orgullosos de lo realizado.

  • ¿En su opinión, el balance de visitas también corrobora ese propósito inicial?

Alcanzar los 200.000 visitantes en un año de pandemia, habiendo empezado a finales de junio y con las condiciones que hay por todos conocida, podemos estar razonablemente satisfechos. Tenga en cuenta que ha habido periodos en estos meses que, por ejemplo, no se podían hacer visitas en autobuses o visitas con un gran número de personas. Por lo que entendemos que ha sido un éxito de público.

  • ¿Para las localidades que han acogido las sedes que ha supuesto esta edición?

Los habitantes, las personas que habitan en las distintas localidades que han acogido la muestra, están volcados. Lo han visto como una oportunidad, en un momento en el que las distintas formas de abordar la pandemia, sobre todo, con las restricciones, con las medidas que se han tenido que tomar, siempre desde el punto de vista de asegurar la salud de las personas, han incidido muy negativamente no sólo en este proyecto expositivo, sino en el sector del turismo en general. Evidentemente, una apuesta como ha sido Las Edades del Hombre, supone realmente un ejemplo de cómo a través de los recursos, de ese rico patrimonio que atesora la Comunidad, podemos reactivar la economía, generando riqueza y creando expectativas tangibles.

Tampoco podemos olvidar el efecto positivo de Las Edades en esa incidencia psicológica que está produciendo la pandemia en muchas personas. Al respecto, creo que este proyecto cultural crea de alguna forma una atmósfera de optimismo, en la medida en que esa reactivación económica que muchos están esperando se ha podido materializar, con la apertura de locales y negocios que Las Edades propicia.

Tengo que dar las gracias a los vecinos, a los que regentan esos negocios y, por supuesto, a los alcaldes de esas localidades, porque todos ellos se han volcado completamente en una exposición que se ha abierto en un momento de dificultad, transformando esa pesadumbre en una auténtica oportunidad. Ahora estamos en otro momento de la pandemia, con esa nueva variante, y habrá que adaptar las medidas necesarias, pero también tengo que decir que, comunidad autónoma, como país, debemos sacar pecho del proceso de vacunación de la población, de los buenos resultados y del porcentaje de personas vacunadas, uno de los más altos del mundo.

  • Habla usted de la exposición como un éxito colectivo…

Es que lo es. A mí me gusta, a la Consejería, nos gusta hablar de un ecosistema colaboración. Un ecosistema que, al igual que cuando hablamos de sostenibilidad, hay que cuidarlo, mimarlo y practicarlo. Es decir, la cooperación interinstitucional, la colaboración público-privada y el diálogo, que es lo que nos a dar como resultado que proyectos, como Las Edades del Hombre, salgan adelante. Y todo ello bajo el paraguas de esa visión de comunidad y territorio que debemos tener. Bajo esa estrategia de atención al medio rural, un medio que sabemos que lo ha pasado y lo está pasando muy mal, pero que no debemos permitir que los ciudadanos que habitan en el medio rural se sientan ciudadanos de segunda.

  • ¿Y ahora toca la internacionalización a partir de 2023?

La internalización era al llegar a la Consejería una de nuestras estrategias. La internalización del turismo, de todos sus ámbitos, en todos los segmentos de población, porque pensamos que, si precisamente podemos sentirnos orgullosos, es precisamente de la cultura, del patrimonio, la naturaleza, la gastronomía y la enología que atesoramos en esta Comunidad. Somos conscientes también de que es un momento duro, con nuevas restricciones en frontera en determinados países, que siempre trataremos de paliar con acciones de divulgación entre el turismo nacional.

Tenemos que reiterar que Castilla y León es un destino caracterizado por sus espacios abiertos, no masificados, donde se puede disfrutar de otra manera del tiempo de ocio. Contamos con suficientes recursos para elaborar un plato con muchos ingredientes que gusten a mucha gente. Y aquí Las Edades del Hombre juegan un papel fundamental. El patrimonio es nuestro petróleo y, por tanto, hay que verlo como un recurso generador de riqueza, de dinamización social, que tenemos al alcance de la mano.