¿Hay riesgo de rebrote en Barcelona?

El coronavirus sigue al acecho. La culminación de la desescalada hace ahora dos semanas no ha conseguido despejar la amenaza de la epidemia, que vuelve a cernirse sobre Barcelona. Aunque, de momento, tanto autoridades sanitarias como expertos consideran que la capital catalana está fuera de peligro, lo cierto es que la evolución de los últimos datos epidemiológicos despiertan cierta inquietud: en este sentido, la famosa Rt -número de personas a las que infecta cada contagiado- está creciendo y ha regresado a niveles del inicio de la pandemia -finales de marzo-, situándose ahora en 1,36, cifra que a la que no llegaba desde el 24 de marzo (1,56) -debería de estar siempre por debajo de 1 para que la epidemia remita-.

La Rt, que se convirtió en un elemento importante y asiduo para conocer la evolución de la epidemia en su fase más crítica, puede erigirse ahora en una señal de alarma. De momento, expertos consultados consideran que “no hay peligro” porque todavía está bajo control: el físico, experto en la materia y asesor de la Generalitat durante la gestión de la fase crítica de la pandemia, Álex Arenas, asegura que, por ahora, no es alarmante porque “parece que se conoce la trazabilidad de los contagios”, pero también advierte de que no se puede bajar la guardia porque la “epidemia es muy rápida” y Barcelona tiene mucha densidad de población.

En este sentido, otro dato a tener en cuenta que confirma esta tendencia preocupante son los contagios en Barcelona de esta semana (254), que se han prácticamente doblado con respecto a la anterior (138), según datos de la Generalitat. Bien es cierto que esos datos incluyen pruebas PCR o pruebas de anticuerpos que detectan casos pasados, aunque las datos de la Agencia de Salut Pública de Barcelona apuntan a la misma tendencia -con pruebas PCR-: 125 entre el lunes y el viernes -último día que ha publicado los datos-, mientras que entre el lunes 22 y el domingo 28 de junio se registraron 80 casos.

En un momento en el que la OMS ha admitido que el virus está descontrolado, un vistazo a la realidad de Barcelona nos puede ayudar a comprender si esa primera afirmación es cierta hoy. Gracias al mapa interactivo realizado por Agencia de Calidad y Evaluación Sanitarias de Cataluña (AQuAS) y que se actualiza regularmente, podemos saber cuál es la situación en la capital catalana barrio a barrio. No se puede olvidar que el pasado viernes, la consellera de Salud, Alba Vergés, aseguró que existía en la ciudad un brote de coronavirus “no preocupante” y que estaría controlado. Un día antes, durante una de sus comparecencias diarias, Fernando Simón, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, habló de dos pequeños brotes en Barcelona que estaban siendo sofocados, hecho que fue desmentido por la conselleria dirigida por Vergés.

Cuatro de los diez distritos de la ciudad han experimentado un alarmante repunte en los últimos días, según las cifras de la Generalitat -que ahora, también, está haciendo más pruebas y los hospitales, por el momento, no sufren mayor presión-. Así, Sant-Montjüic, que la semana pasada contabilizó 14 positivos, esta está en 77; Sarrià-Sant Gervasi contabilizó 11 y esta, 33; Eixample ha pasado de 35 a 56; y, Horta-Guinardó, de 15 a 24. El resto de distritos mantienen unas cifras similares a la semana anterior.

En Barcelona se han detectado en este tiempo un total de 20.050 casos positivos mientras que el número de los que son sospechosos asciende a 93.493. Hay una serie de barrios donde la situación es delicada. Solamente en Sant Andreu hay 455 casos confirmados mientras que en la zona de Sagrada Familia es de 437. En el barrio de Gràcia ya se han detectado 319 enfermos con coronavirus, cifra que en Sants está situada en 296, seguida de cerca por Les Corts con 270.

Afortunadamente las cifras de mortalidad han descendido de una manera importante. Del pico de fallecimientos del 31 de marzo que se situó en 175, es decir 136 muertos por encima de la cifra habitual en Barcelona antes del coronavirus, se ha pasado a los 24 del pasado 25 de junio, una cantidad que no difiere mucho de lo que es un día habitual en la capital catalana.