A semifinales sin tregua

El Madrid se mide al Valencia mañana, 48 horas después de deshacerse del Murcia

En la plantilla del Madrid nadie contaba con pelear durante tres partidos con el UCAM para estar en semifinales. La derrota en Murcia puso a los de Laso en la enésima situación sin vuelta atrás de la temporada. El equipo, sin brillantez, dio la talla para resolver una eliminatoria incómoda y marcada por la espesura. En la siguiente ronda espera el Valencia, que ha contado con 48 horas más de tregua para una serie que arranca mañana en el Palacio. Los de Pedro Martínez no son sólo peligrosos por contar con dos días más de descanso o preparación. Llegan con el equipo al completo salvo Van Rossom y en las últimas semanas cada vez se parecen más al grupo que asombró a Europa en los primeros meses de la temporada.

Para el Madrid, el partido de ayer venía marcado por los «tocamientos» de Rojas a Ayón en el segundo choque. El pívot mexicano apareció tan motivado que tuvo un efecto contagioso en sus compañeros. El Madrid salió como si la falta de respeto del escolta murciano hubiera afectado a todo el bloque. La seriedad atrás se tradujo en un arranque que dejó al UCAM noqueado (14-0) de salida. Los de Katsikaris fueron incapaces de anotar en los primeros seis minutos y ese lastre resultó excesivo para cualquier intento de reenganche posterior. La defensa del Madrid no se limitó a dejar en blanco al rival. Permitió sólo cinco lanzamientos en los seis primeros minutos. En ataque los de Laso buscaron con insistencia a Ayón. Antes de arrancar el partido, recibió el trofeo de MVP del mes de mayo y en el primer cuarto respondió con 11 puntos que fueron decisivos en el despegue.

Laso apostó de partida por un equipo con ganas de defender. Taylor se encargó de tener controlado al hiperactivo Campazzo. Maciulis y Ayón tampoco son de los que dan facilidades y así el despegue del Madrid dejó resuelta la eliminatoria muy pronto. Los 17 puntos y 5 rebotes que llevaba el base argentino en el descanso no eran nada más que una bonita estadística. «Facu» exhibió todas sus virtudes cuando el Madrid ya había puesto rumbo a semifinales. El favorito fue muy superior en todo momento. Incluso cuando el partido se trabó y empezó el reparto masivo de técnicas, no hubo lugar para la distracción. Las diferencias siempre rondaron la veintena de puntos y Laso pudo repartir minutos para que nadie llegue al primer capítulo contra el Valencia más forzado de lo que ya está a estas alturas de la temporada.

En Vitoria, el Baskonia resolvió su serie ante el Herbalife, con lo que los cuatro cabezas de serie coinciden con los equipos que desde mañana buscarán la final.