F. C. Barcelona
Ante todo, mucha calma
«Cuando el comportamiento de un jugador me pone bajo presión, o cuando critican los aficionados, el club o la Prensa, calma y sentido común.
«Cuando el comportamiento de un jugador me pone bajo presión, o cuando critican los aficionados, el club o la Prensa, calma y sentido común. Si no, estás acabado», cuenta Carlo Ancelotti en su biografía. Dice que lo aprendió del trabajo de sus padres en el campo, que allí aprendes la virtud de esperar y esperar mientras todo alrededor se vuelve frenético. No están siendo los mejores días del entrenador del Real Madrid, que ha pasado de ser un héroe a no saber qué pasará en junio con su futuro. Le pitan en su estadio, se habla de su forma de entrenar, pero él no pierde las formas, aguanta y cree que al final, como ocurrió la temporada pasada, se saldrá con la suya. Y el final de esta temporada comienza hoy, en el Camp Nou: «El partido lo decidirá la cabeza, no el físico», dijo ayer el entrenador paciente. «Algunos me dicen que tengo una paciencia sin límite, pero tiene límite. Me encuentro bien y voy a seguir estándolo. Conozco este mundo y tener la cabeza fría es lo más importante, también para preparar este tipo de partidos. Tengo la confianza total en los jugadores y en que lo que viene va a ser positivo. En el último periodo no hemos jugado bien, pero la confianza es total», continuaba ayer el Ancelotti más sereno, el hombre que transmite calma en los minutos más urgentes. Con veinte años de carrera cuenta en el libro «Mi árbol de Navidad» que en un momento crucial de la temporada, «una de las tareas del entrenador es proteger a las tensiones naturales que le acompañan» y que en ese momento delicado se pueden pensar dos cosas: «Lo malo nunca se acaba» o «Ninguna noche, por oscura que sea, impide al sol salir por la mañana». Hoy, en Barcelona, va a hacer un día nublado, de invierno, y se jugará de noche, pero el Madrid y su entrenador esperan ver algo de luz el lunes, ver ya un asomo de primavera.
✕
Accede a tu cuenta para comentar