Bale «ayuda» a Zidane

Asegura que quiere estar en la final aunque sea en el banquillo. Trabaja para sentirse a tope el sábado, pero asume que puede jugar Isco.

279 periodistas, de 126 medios, abarrotaron ayer Valdebebas, 80 de ellos internacionales. No cabía nadie más en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva del Madrid ni luego en el pasillo que, en el césped, formaban los periodistas y por el que iban desfilando los jugadores. Se hablaba español, inglés e italiano, a Kroos le preguntaron en alemán. Había un orden, pese a la avalancha de medios por el día de las puertas abiertas del club blanco. Se preguntaba por todo, por las sensaciones personales, por el rival, pero, sobre todo, el asunto, eran Isco y Bale, los dos futbolistas que ocupan la única duda de Zidane para el choque contra la Juve. «Es una decisión difícil porque todos están en forma y voy a tener que elegir quién empieza y quién se queda en el banquillo. Además de los que se quedan fuera», contestó el técnico a la batería de preguntas acerca de los dos. «Pero pueden jugar juntos, lo han hecho en 16 partidos», continuó el francés. «¿Bale o Isco? Menos mal que no soy entrenador. Tenemos la suerte de contar con dos grandísimos jugadores y quien salga lo hará bien», respondía Casemiro cuando le hicieron, como a todos, la pregunta más repetida de la mañana.

Nadie quería mojarse, aunque Zidane dio a entender que Isco llega un poquito mejor por una simple cuestión de cantidad: ha disputado más minutos que Bale. Lo que no está claro es si eso sería definitivo para la final. Lo mejor, entonces, era preguntar al protagonista. Bale fue uno de los últimos en salir ante la Prensa: «No estoy al ciento por ciento, pero estoy trabajando en ello para estar a punto para la final», aseguraba el futbolista en inglés. El partido se juega en su casa y esa emoción casi le obliga a trabajar más. «No estaré decepcionado si no soy titular contra la Juve, sí que lo estaría si no hubiera podido llegar a la final. Estoy dándolo todo para llegar en forma y tener mi tobillo preparado», continuaba la estrella del Real Madrid, que desde mediados de abril, desde el encuentro contra el Barcelona, no juega y es lo que va en su contra.

Si el titular es Isco, no es sólo un cambio de jugador en el once, es que también varía el equipo: «No quiero hablar de si jugará Bale o Isco porque somos 23 jugadores. Pero sí puedo decir que cambia jugar con 4-4-2 o 4-3-3. Con el primero se juega con un jugador más en el centro del campo y con el 4-3-3, no. La cosa cambia. Hay que elegir la formación para ganar a la Juventus, no a los jugadores. Tengo una opinión sobre qué sistema es mejor, pero no la voy a decir», había explicado Kroos.

Con cuatro centrocampistas, el Madrid ha conquistado la Liga, con Isco protagonizando actuaciones estelares. Eso no se le escapa a nadie. «Ha estado fantástico en este tramo final de Liga y estamos muy contentos por él, nos ha ayudado mucho. Tanto si juega él como si juego yo, nos felicitaremos. Lo importante es el equipo, cómo juguemos y que consigamos el título. Titular o desde el banquillo, haré lo que tenga que hacer», reconocía Bale.

Se dijo que en el partido contra el Barcelona, cuando Bale volvía de una lesión y cayó antes del descanso, el futbolista le aseguró a Zidane que estaba listo. «No me tiene que decir nada, está listo y está trabajando con todos nosotros, con una ilusión tremenda porque juega en casa. Pero esa motivación la tienen todos los jugadores y eso es lo que me interesa», había explicado el entrenador francés en la sala de Prensa.

Bale ha sido protagonista en las dos últimas Champions del Madrid. El gol del desempate en la Décima; el principio y el penalti que tira medio cojo en la Undécima. Cardiff, además, le alienta: «Es una ocasión muy especial para mí, en mi ciudad, sólo falta un pasito más que es ganar la Champions otra vez», afirmaba. «Vamos a ir a muerte», decía por su lado Isco, «que los aficionados estén tranquilos».