Francia

Lindsey Vonn y Marcel Hirscher piden cartas para un repóquer de triunfos

La estadounidense Lindsey Vonn y el austriaco Marcel Hirscher, cuádruples ganadores de la Copa del Mundo de esquí alpino, confirmaron este fin de semana, con triunfos en los gigantes de Are (Suecia) y Val d'Isere (Francia), respectivamente, su condición de firmes candidatos al repóquer de victorias en la competición que ya lideran.

Tanto Vonn, de 31 años, como Hirscher, de 26, encabezan las generales de la competición de la regularidad en una temporada en la que no hay ni Mundiales, ni Juegos Olímpicos, y en la que podrán centrarse únicamente en buscar su quinta gran Bola de Cristal.

Lindsey, nacida en Saint Paul (Minesota), pero instalada de adolescente en Vail (Colorado) para crecer deportivamente en las Montañas Rocosas, empezó a competir como Lindsey C. Kildow y adoptó su apellido tras casarse con el ex esquiador del equipo USA Thomas Vonn, del que se separó en 2011, firmando el divorcio en 2013.

Vonn, que logró su primera victoria en Copa del Mundo hace diez años, en Lake Louise (Canadá), ganó de forma consecutiva la general de esa competición entre 2008 y 2010; y volvió a hacerlo la campaña 2011-12, después de haberla cedido por tan sólo tres puntos el curso anterior a su gran rival y amiga alemana Maria Riesch -Hoefl, de casada-, con final polémico que supuso un paréntesis en su amistad.

La esquiadora más mediática del circuito, campeona olímpica y doble oro mundial, ya podría presentar el mejor palmarés de la historia de no haber tenido que compaginar sus numerosos éxitos con no pocas lesiones, que no impidieron que ganase ocho veces la Copa del Mundo de descenso, seis la de supergigante y tres la de combinada.

Tras sufrir un accidente durante el 'súper' de los Mundiales de Schladming (Austria), en 2013, y varias recaídas que la dejaron fuera de los Juegos de Sochi (Rusia), un año después; Vonn regresó el curso pasado para capturar los dos Globos de Cristal de velocidad y batir el histórico récord de 62 victorias en Copa del Mundo de la austriaca Annemarie Moser-Pröll, la gran campeona de los años 70.

Lo mejoró en Cortina d'Ampezzo (Italia), en presencia de la leyenda viva del golf Tiger Woods, por entonces -y durante casi tres años- su novio. Vonn acabó tercera en la general, por detrás de la austriaca Anna Fenninger y la eslovena Tina Maze -las dos grandes ausentes esta temporada-, tras ampliar su récord de triunfos a 67.

Se fracturó un tobillo esta pretemporada en Nueva Zelanda, pero, una vez recuperada -de esa dolencia y de la mordedura de uno de sus perros-, Lindsey reapareció, a finales de noviembre, en el gigante de Aspen (EEUU), en el que se salió de pista.

La incógnita sobre su estado de forma se despejó rápidamente, al siguiente fin de semana, cuando arrasó donde acostumbra a hacerlo: en Lake Louise. En su 'jardín' deportivo volvió a ganar tres veces en tres días, elevó su plusmarca a 70 victorias, 18 de ellas en las citadas pistas de Alberta; y tomó el liderato de la competición.

Este sábado ratificó que está que se sale, al ganar el gigante de Are, donde no sólo mejoró su récord a 71 triunfos (en todas las disciplinas), sino que amplió liderato, al aprovecharse de la lesión previa a la prueba de su compatriota Mikaela Shiffrin, la emperatriz del eslalon, que, con 20 años es oro olímpico, doble campeona mundial y triple ganadora de la Copa del Mundo de la modalidad.

La baja de Shiffrin también la aprovechó Petra Vlhova para lograr su primer triunfo y convertirse en la segunda eslovaca, después de Veronika Velez Zuzulova -sexta este domingo-, en ganar en Copa del Mundo.

Lindsey, que no compitió en el eslalon, lidera la competición con 400 puntos, 104 más que Shiffrin y con 122 sobre la suiza Lara Gut. Y si las lesiones la respetan, es firme candidata a colocarse a tiro de uno de la plusmarca de seis victorias globales de Moser-Pröll.

Hirscher, que marcó un hito en marzo pasado, al ganar por cuarta vez seguida la competición, demostró que aspira a igualar esta misma temporada el récord de cinco victorias finales de su compatriota Marc Girardelli, que ganó para Luxemburgo la Gran Bola de Cristal las temporadas 1984-85, 85-86, 88-89, 90-91 y 92-93.

El astro salzburgués, que cimentó sus cuatro triunfos globales ganando pruebas técnicas -al igual que lo hicieran antes dos mitos como el sueco Ingemar Stenmark y el italiano Alberto Tomba-, acortó distancias con el noruego Aksel Lund Svindal, brillante en las primeras pruebas de velocidad, al ganar su primer supergigante en Beaver Creek (Colorado, EEUU), donde también se apuntó el gigante.

Hirscher, asimismo cuádruple campeón del mundo y plata olímpica (de eslalon), elevó a 34 su número de triunfos este sábado al ganar por quinta vez en Val d'Isere, por cuarta en un gigante. Disciplina en la que mejoró los quince triunfos de Tomba y ya es cuarto en la lista histórica, por detrás de Stenmark (46), del estadounidense Ted Ligety (24) y del suizo Michael von Grünigen (23).

Le arrebató el liderato a Svindal, vencedor de la Copa del Mundo en 2007 y 2009; quíntuple campeón mundial y que en los Juegos de Vancouver'10 (Canadá) ganó una medalla de cada metal. El noruego, de 32 años, ya lleva tres victorias esta temporada, tras pasar en blanco la anterior, al romperse el tendón de Aquiles izquierdo.

Y al acabar segundo el eslalon de este domingo -que se anotó el noruego Henrik Kristoffersen- Hirscher fortaleció su ventaja al frente de la general, que encabeza ahora con 440 puntos, 123 más que Svindal y con 215 sobre el alemán Felix Neureuther, tercero este domingo en Are.