Alfredo Duro: Sí, acabemos ya con este circo de una vez

Me niego a aceptar que Gerard Piqué vaya a seguir marcando la agenda de la selección española hasta que finalice el Mundial de Rusia. Sencillamente, no. Es inaceptable, Quim. Te pongas como te pongas la selección está por encima de cualquier jugador y muy especialmente de Piqué. Ya está bien de plebiscitos populares y periodísticos sobre su figura. El agotamiento y desgaste que sufrimos todos con sus amores, sus odios, los pitos, las pancartas, los tuits y toda la parafernalia sociopolítica que tanto le gusta protagonizar son una carga que no podemos seguir llevando los demás por él. Julen Lopetegui tiene que prescindir de Piqué y hacerlo para que el clima de la selección deje de asfixiarnos a todos durante el Mundial.

► Contamina al grupo

Te remito a lo que el pasado jueves debatíamos en el «Chirijuicio» del «Chiringuito»: Piqué titular o Piqué suplente contra Albania. Esa es la cuestión, Quim, nuestra permanente condena a hacer que nuestras vidas giren en torno a los caprichos de Gerard y su vocación de mártir por una causa que sólo garantiza el conflicto y la división. Para ser campeones tenemos que dejar de contaminar el ambiente y el defensa lo contamina como nadie lo ha hecho nunca en la historia de la Roja. Sabes mejor que yo que Piqué no va a cambiar su manera de ser ni sentir. ¡Ya está bien!

► No es insustituible

¿De verdad crees qué es insustituible en la selección? Ver jugar a Nacho, Bartra, Íñigo Martínez o Azpilicueta formando pareja con Sergio Ramos ofrece una total y absoluta garantía. Dudo mucho que cualquiera de ellos baje el nivel. Lo que necesitamos es que Lopetegui haga un nuevo ejercicio de valentía y responsabilidad. En su momento dio un paso al frente con Casillas y con Piqué es urgente hacerlo. Hay que acabar con esta sensación de circo ambulante que la presencia de Piqué genera en la selección. ¡Basta ya de excusas!

Quim Doménech: No, no hay presión que valga: se queda

Ni tú, Alfredo, ni nadie salvo el propio jugador o Lopetegui decidiréis en qué momento tiene Piqué que dejar de vestir la camiseta de la selección española. A pesar de vuestra insistencia y de vuestros constantes intentos de retirarle antes de tiempo, Gerard se queda. Y lo hace marcándose el maravilloso reto de demostrar que se puede estar comprometido con la selección sin ninguna cuota de patriotismo que se interponga. Sabéis cómo piensa y siente y os ha dejado claro que tras el Mundial de Rusia dejará de acudir. Porque también entiende que es complicado que se le mire con lupa en cada convocatoria, que sea el centro de todos los focos constantemente y sobre todo que sus compañeros tengan que soportar ambientes tensos en cada concentración. Pero hasta el verano dejadle tranquilo, como mínimo por respeto a los que pensamos que Piqué también representa la forma de sentir y actuar de muchos españoles.

► No le cambiaréis

En algo estamos de acuerdo, Duro. Piqué no va a cambiar su forma de actuar. Seguirá siendo un futbolista que se compromete con unos ideales políticos y que los manifiesta públicamente. Eso quizá os molesta a algunos pero que yo sepa aún hay cabida para la libertad de expresión. Al que le incomoden sus tuits, que no le siga. Pero merece ser juzgado siempre por su fútbol, no por su posicionamiento político o por pedir un referéndum para Cataluña.

► Basta de presiones

Deben prevalecer los criterios deportivos. Como ha ocurrido siempre. Por eso Piqué se ha partido la cara por la selección desde los 15 años. Lopetegui ya ha demostrado que no entiende de presiones ni campañas. Sabe que no hay nadie mejor en su posición. Y le seguirá llamando por mucho que te pese. Claro que hay recambios, lo que no hay son argumentos para dejar de convocarle. Insisto, se queda y quizá gracias a él volvamos a celebrar un Mundial.