En defensa de Zidane

Es tremenda la falta de memoria que sufre el fútbol. Es increíble que tras un empate ante Las Palmas en el Santiago Bernabéu se hayan tirado muchos como lobos hambrientos a por Zidane, culpabilizándole de que el Real Madrid no sea líder de La Liga cuando todavía tiene un partido pendiente y está a sólo un punto del Barça. Los nervios sólo son buenos para los delincuentes y para los malos toreros. Ya pocos se acuerdan de que Zizou es el técnico del récord de partidos sin perder, 40, y de que llegó al equipo con un vestuario dividido. Pese a ello conquistó en un tiempo récord de seis meses la Undécima Copa de Europa y, posteriormente, el Mundialito de clubes, más la Supercopa de Europa.

Menos dramas

Su Madrid está muy vivo en La Liga y en la Champions mientras el balón en Nápoles no diga mañana lo contrario. Para mí, Zidane es el responsable en lo bueno y en lo malo, pero no el principal culpable. La baja forma de algunos jugadores ha sido clave para que algunos hayan elevado un par de partidos malos a la categoría de tragedia griega. Porque luego llega un choque como el de Ipurua y adiós a dramas y tragedias. Zidane, que se ha ganado el respeto de todos y es injusto culparle por dos tropiezos, es el técnico ideal para el Madrid.